Histórico robo a sindicalizados

Luego de que trabajadores varias plataformas perdieran el miedo al denunciar los descuentos ilegales que realiza la Sección 47 del Sindicato de Trabajadores Petroleros de la República Mexicana (STPRM), el jubilado petrolero Carlos Enrique León Ramírez hizo un llamado a sus compañeros a hacer lo propio contra el corrupto dirigente pero de la Sección 42, Luis Gerardo Pérez Sánchez, quien desde hace varios años comete un fraude en seguros de vida fantasma que son cobrados precisamente mediante descuentos en las tirillas.

Tal como ya lo había denunciado desde hace más de un año, el jubilado recordó que al igual que en la 47, a los agremiados de la Sección 42 catorcena tras catorcena también se les efectúa el descuento de diversos conceptos, entre ellos el del llamado “Fomento Deportivo” bajo la clave 442-D, así como la de “Ayuda Mutua” con la clave 442-J, entre otros conceptos fuera de toda legalidad.

León Ramírez señaló al jefe de Area de Nóminas, Angel Mendoza Adib, así como al subgerente de Recursos Humanos, el ya señalado Hugo Herbert Arellano, como los funcionarios que desde el interior de la empresa permiten la ilegalidad de los descuentos.

Indicó que la molestia destapada la semana pasada con los agremiados de la 47 no es nueva, pues él mismo al cuestionarse porqué de los descuentos le dieron la misma justificación, que se trataba de un presunto seguro de vida.

No obstante, luego de un padecimiento de salud, Carlos León Ramírez descubrió que se trataba de un seguro de vida fantasma, al que se estaría prestando un agente de seguros de nombre Manuel Moreno Zavala, dicha persona también se dedicaría a las mismas prácticas en diferentes secciones incluso de otras ciudades, como la Sección 10 y la 1.

Al requerir los servicios del supuesto seguro contratado con la empresa seguros Thona, le informaron que no contaba con ningún servicio contratado y de entonces a la fecha ha entablado una batalla por esclarecer a dónde va el dinero descontado a su pensión.

Desfalco millonario

León Ramírez estimó que esta situación existe desde hace más de una década, incluso desde antes de que se impusieran las actuales dirigencias, y más bien estos sólo han continuado lucrando con los trabajadores petroleros.

De acuerdo con sus estimaciones, antes de que fuera contratado el actual seguro de vida fantasma, entre 2001 y 2009 hubo tres diferentes servicios de aseguradoras, primero Tepeyac, luego Inbursa y de nuevo con seguros Tepeyac.

Los montos calculados del tamaño del fraude ascienden a más de 142 millones 492 pesos tan sólo en ocho años; pero la práctica se ha especializado y perfeccionado.

Por ello llamó a los agremiados de la Sección 42 a tener valor y realizar las denuncias correspondientes ante la Procuraduría Federal del Trabajo (Profedet), ya que ninguno de esos descuentos son legales y contravienen la Ley Federal del Trabajo, sus Estatutos Generales, Acta Constitutiva y Contrato Colectivo de Trabajo.

(Texto y fotos: Redacción / POR ESTO!)