Campeche

Pibipollo, manjar sagrado de los vivos

El 63 por ciento de la población campechana, equivalente a 566 mil personas profesan la religión católica, la gran mayoría se volcaron a la celebración de los Fieles Difuntos, en especial la zona Norte del Estado, donde el ritual es declarado Patrimonio Intangible de la Humanidad y el principal ingrediente infalible y sagrado es el pibipollo en sus diversas presentaciones. En la actualidad, mantener vivo el ritual del Hanal Pixan resulta caro, sin embargo los campechanos hicieron un esfuerzo para cumplir con la tradición de alimentar a las ánimas, en las comunidades rurales lo solventan con la crianza de animales de traspatio de pollo y cerdo, destinado para estas fechas. En las zonas urbanas, cada pibipollo elaborado en casa puede tener un costo de entre 300 y 500 pesos, aunque quienes comercializan ese platillo pueden alcanzar hasta 500 y 700 pesos cada pieza, según el gusto, el más caro, aquellos elaborados con tres carnes, de pollo, cerdo y res. El Pibipollo, es un platillo a base de maíz y xpelón (frijoles tiernos), relleno de carne de puerco o pollo, envuelto en hoja de plátano y horneado bajo tierra (actualmente muchas familias lo hacen en el horno de sus estufas) y que es el elemento principal del altar del “Hanal Pixán” (alimento de los muertos por su traducción del maya). Es decir, para las familias campechanas no hay altar de muertos, sin Pibipollo, porque es una comida sagrada e intocable para la población peninsular, ahora, lo que hace único a este platillo es la simbología que tiene dentro de la cultura Maya. Por sus ingredientes que al ser cocinados representan a un difunto, en más detalles, la masa del Pibipollo simboliza carne del muerto, las entrañas son representadas por el guiso de carne con el que se rellena el platillo. En las comunidades rurales es todo un acontecimiento, familias enteras inician su preparación desde un día de anticipación con la recoja de leñas, hojas de plátano, la apertura de los huecos, y el uno de noviembre, preparan la masa, el col, la carne, para elaborar hasta 30 pibipollos, según el número de integrantes de la familia.