Campeche

CAMPECHE, Cam., 21 de abril.- Cómo reconocer a Cristo Resucitado, hay dos de los cinco sentidos que tenemos que nos pueden ayudar más, la vista y el oído, porque siendo Cristo intangible, el tacto poco ayuda; pero siendo Cristo palabra, el oído sí, expresó el Obispo de Campeche, Francisco González González.

En misa de Resurrección, manifestó que la mayoría de los creyentes privilegian a la vista, por lo que decimos lo vi con mis propios ojos, sin pensar en que Cristo no se presenta a la vista de quienes lo alaban, sino a partir del oído, de lo que dice.

Resaltó que si bien para el día a día tiene más importancia la vista, pero el oído es importante tenerlo en cuenta, dado que Cristo se manifiesta de esta forma, tal como lo hizo con María Magdalena y sus discípulos.

“Hasta que Cristo le llama María, ella con el oído, no con la vista, reconoce a Jesús y en cuanto oye su nombre de boca de Jesús, le dice Rabuní, mi maestro, en hebreo, cuando se termina algo con el sufijo i, es alguien muy querido, muy afectuosamente querido, cómo distinguió María a Jesús, por el oído, por la vista pensó que era un hortelano”, expresó.

El líder religioso recordó la vez en que Pedro vio a Jesús caminar sobre las aguas, el discípulo estaba asustado, por pensar que era un espíritu que caminaba, pero al llamarlo Jesús, este recobró la confianza en el cuerpo que veía sobre el oleaje.

Añadió que les pasó lo mismo a los discípulos que caminaban devastados por el asesinato de Cristo por parte de los romanos, cuando al llegar al sitio de descanso, este les dice “este es el pan y este es el vino”, es cuando ellos se dan cuenta que están en la presencia de Jesús.

“Pensaban reconocerlo con la vista y la vista engaña, por eso me decía mi abuelita, cree la mitad de lo que vez, porque vemos cosas que no son ciertas… Yo lo vi con mis propios ojos, cuando andamos tristes vemos cosas que no son ciertos, cuando andamos muy alegres nos imaginamos de más, desentendiendo de nuestro sentimiento, la vista nos engaña y además la vista es engañosa”, expuso.

González González, en la homilía, ejemplificó que la vista es fácil de confundir como en los juegos de feria donde tienes que ver dónde quedó la bolita, y en los cuales las personas salen perdiendo por confiarse.

“La vista nos engaña y por eso el oído ayuda; por ello Dios hizo la palabra para que pongamos atención, por eso cuando venimos a la eucaristía, se recomienda que estemos atentos escuchando la Palabra, bien pondríamos aquí un cañón o una pantalla de 60 pulgadas para ir viendo la lectura, pero la lectura debe ser escuchada porque es Palabra del Señor, nos dio Dios orejas para que la escuchemos con atención, cuando escuchamos con atención, el pensamiento puede encontrarse con la realidad invisible de Dios, pero real”, detalló.

El dirigente católico comentó que por eso es necesaria la celebración de la Resurrección de Cristo, porque en ese momento es cuando se debe pensar en escuchar más a Dios, en tomar en cuenta sus palabras y que no se vuelvan nada más tinta en una hoja.

“Celebramos hoy la Resurrección de Cristo y en la Resurrección de Cristo, como nos narra el Evangelio, se da el encuentro entre Cristo transformado, ya no es el mismo, tiene otra condición, ya no está sometido a las leyes del espacio y el tiempo, que a todos nosotros nos limitan, estamos en un espacio y en un tiempo, no podemos estar en distintos espacios en un mismo tiempo, pero Cristo Resucitado, aunque sigue teniendo un cuerpo, un cuerpo glorioso, ya no está sujeto a las coordenadas de espacio y de tiempo, sino que se hace presente en muchos lados, de muchas maneras”, puntualizó.