La ciudadana Zoila Reyes Díaz, quien fuera alcanzada por una de las balas que dispararon los policías estatales la madrugada del domingo en la comunidad de Nuevo Progreso -como si se tratara de una balacera contra sicarios-, permanece hospitalizada en una clínica particular, en donde se le diagnosticó que no podrá ser operada, debido a que el proyectil le destrozó todo el hueso del hombro y no podrá moverlo con normalidad. Hasta el momento, los policías continúan en libertad y las autoridades no han dado una respuesta, sólo alegan que se está investigando.
Carmen se ha convertido en una ciudad sin Ley, en donde las mismas autoridades lesionado y dado muerte a las personas. Es totalmente inadmisible que los uniformados abrieron fuego contra civiles, si en ningún momento estuvo en riesgo su vida.
La víctima herida de bala relató que milagrosamente no perdió la vida la madrugada del domingo. En los videos difundidos en redes sociales, se observa cómo la afectada estaba lejos del área de disparos; sin embargo, los “ejemplares” policías disparaban sin precaución sus armas largas.
“Ya no me duele el brazo, aquí estoy con mi herida, aunque ya no quedaré igual, porque no me pueden operar, debido a que mi hueso está fragmentado y no tiene compostura, por lo que así me tendré quedar, sin movilidad”, expuso la señora Zoila, quien relató a POR ESTO! lo ocurrido la madrugada del domingo.
“Lo que pasó, es que yo estaba en mi casa ese día y estábamos a punto de irnos a dormir, ya que habíamos ido a un convivio y estábamos cansados, pero mi cuñada se iba a casa de su abuelita y mi esposo salió a llevarlas, a mí se me olvidó comprar el mentado ‘raidolito’, por lo que le dije a mi hija que fuéramos a comprarlo al ‘oxxito’, que así le decimos nosotros a una tiendita que hay. Por lo que yo no vi para donde agarraron éstos (refiriéndose a su esposo y familiares que iban en la camioneta); yo ya iba a media calle, cuando escuchamos los disparos y vimos a las patrullas pasar a toda velocidad y le cerraron el paso a la camioneta, la cual no alcancé a ver de quién era, ya que nos habíamos bajado al acotamiento”.
“Rápido se me vino a la mente y salimos corriendo, cuando llegamos a la esquina sí vimos a la gente así a lo lejos, jamás vi la camioneta de mi marido, porque estaba metida hacia abajo, dice mi cuñada que las patrullas lo rodearon y él se bajó a la carretera”.
“Sentí un golpe en la espalda… sentí que tenía algo roto”
“Cuando escuchamos la ráfaga, les dije a las muchachas que estaban ahí ‘están disparando’ y regresamos otra vez, cuando sentí un golpe en la espalda y con mi misma mano me tocaba yo, fue que sentí que tenía algo roto y les grité a mis cuñadas que me habían pegado, pero no me escuchaban por el ruido”, narró la víctima de la cobarde agresión policial.
Hasta el momento no hay ninguna versión oficial de lo sucedido por parte de la Vicefiscalía General Regional ni de la Secretaría de Seguridad Pública del Estado de Campeche, encabezadas por Mario Humberto Ortiz Rodríguez y Jorge Argáez Uribe, respectivamente.
“Ya interpuse una denuncia, a ver qué hacen, pero sí me gustaría que se hiciera justicia, no nada más soy yo, hay otras personas que salieron heridas y además habían muchas personas y a los policías no les importó. El pastor que me ayudó, dice que una bala le pasó cerca”.
Mencionó que, pese a que los policías estaban algo retirados, los dispararos fueron dirigidos hacia la gente y no al aire, motivo por el cual los proyectiles la alcanzaron, marcándola para siempre.
“Ellos (policías) dicen que estaban disparando al aire, NO puede ser, porque los disparos fueron directo a las personas, a mí la bala me entró directamente, NO de rebote, porque salió y explotó en mi cuerpo, debido a eso mi hueso está demasiado fragmentado y ya NO tiene de dónde agarrarse”, narró Reyes Díaz.
“Es lo más horrible que me ha pasado”
“Sólo pido que se hagan cargo de los gastos médicos y de los vecinos que resultaron con heridas; yo soy trabajadora del rancho y mis manos me sirven para laborar, pero ahora NO podré hacerlo de forma correcta. Es lo más horrible que me ha pasado en la vida”.
Por último, la dama expresó que lo que hicieron los ‘pepos’ es un abuso de autoridad, pues “su argumento es que la gente tenía palos y piedras, cuando es mentira, porque nadie traía nada en el momento que ellos se bajan de las patrullas empezaron a echar balazos”, aseguró.
Cabe mencionar que no es la primera vez que efectivos de las Policía Estatal Preventiva hacen uso excesivo de la fuerza pública y abusan de su autoridad, pues en manifestaciones pacíficas ciudadanas y de campesinos han golpeado al Pueblo, siguiendo las órdenes de Alejandro Moreno Cárdenas, cuyo Gobierno se ha caracterizado por privilegiar la “Ley del Garrote” antes que el diálogo.
(Texto y fotos: Ignacio Morales)