CANDELARIA, Cam., 28 de mayo.- Un presunto permiso de uso común expedido por alguna dependencia de gobierno pone en peligro las mil 400 hectáreas de la Reserva Forestal de Pejelagarto, donde existen árboles de hasta 100 años de antigüedad que serán derribados en fechas próximas, a lo que se oponen ambientalistas de este municipio quienes pidieron la intervención de los tres órdenes de gobierno para revertir esa situación, porque sería un verdadero ecocidio permitir que se concrete el propósito.
Ante esta situación, este martes un grupo de ciudadanos se manifestaron en contra de esa determinación en la Reserva, donde pudieron constatar la majestuosidad de los árboles de más de 20 metros de altura y con tantos años de antigüedad, cuya destrucción sería un completo error, porque son las ultimas reservas con que cuenta este municipio.
Además, en el sitio se encuentran vestigios de ruinas de los antiguos mayas, por lo que el lugar bien podría ser aprovechado para crear un parque ecoturístico donde los turistas puedan apreciar esa belleza natural que aún persiste.
De permitirse este ecocidio por unos cuantos pesos, también se pondría en riesgo la gran biodiversidad de especies de animales que habitan en este lugar, como son monos aulladores, reptiles, venados, jabalís, pavo de monte, entre muchos otros.
Un grupo de alrededor 30 personas acudieron al lugar en donde se manifestaron y colocaron letreros amarrados alrededor de los árboles en señal de protesta a la determinación de alguna instancia gubernamental, que realmente es incongruente con la situación que se está viviendo en el planeta, además de que se supone que esas dependencias ambientales están para conservar la naturaleza, no para alentar la destrucción de los recursos naturales.
Lamentaron que se expidan permisos a estas alturas para seguir depredando el medio ambiente y solicitaron el apoyo de instancias ambientalistas del país o de todo el mundo, porque permitir que talen estos árboles sería una aberrante decisión y un crimen a la naturaleza con repercusiones graves, incluso al planeta, dado que estos árboles son de las ultimas reservas que existen en el municipio.
“Pedimos a los tres órdenes de gobierno que intervengan en este asunto para evitar la destrucción de esta reserva natural del municipio, que bien podría servir como un parque ecoturístico, ahora con el proyecto del Tren Maya”, asentaron.
Dijeron que los beneficios monetarios que los ejidatarios puedan obtener por la tala de estos árboles no se compara con los graves daños que ocasionarían, más en estos tiempos en que se supone que se mantiene una lucha contra el calentamiento global.
Los manifestantes expresaron que permitir esta destrucción es incongruente con la política de nuestro Presidente de la República, Andrés Manuel López Obrador, quien está preocupado por esta situación y ha implementado el programa “Sembrando Vida”, precisamente para reforestar el país.
Argumentaron que esta medida fue arbitraria y bajo la mesa propuesta por alguna dependencia ambiental, por lo que solicitó la intervención del gobierno en sus tres órdenes para impedir este ecocidio, porque para poder ver árboles de este tamaño y dimensiones tendrían que pasar de 80 a 100 años.
Los inconformes portaban pancartas en manos con consigas en contra de permitir el ecocidio e incluso colocaron letreros en los árboles ya marcados para ser destruidos, e indicaron que no lo permitirán, por lo que solicitan a la sociedad en general que se sume para impedir el ecocidio, y al gobierno, que intervenga para su conservación.
(POR ESTO! / Campeche)