El incremento de más de un 50 por ciento en la carne de pollo que le ofrecen a los comerciantes de los mercados públicos por las empresas Bachoco y Crío afectan enormemente los vendedores así como a los consumidores, mientras que las autoridades de la Procuraduría Federal de Consumidor (Profeco), aducen que no pueden proceder contra las empresas avícolas porque el precio de este alimento se encuentra liberado, dijo José del Carmen Bolón López, secretario general del Sindicato de Expendedores de aves de corral.
Explicó que el incremento en el precio del kilogramo de pollo ya está repercutiendo en los hogares de las familias carmelitas, debido a que las dos granjas de pollos que existen en el estado de Yucatán, son los que controlan el precio de este alimento, pues en la caseta fitozoosanitaria que existe en el poblado de Nuevo Campechito, no dejan pasar estos alimentos que provienen de otras entidades.
“Ahorita el kilogramo de pollo que traen los productores es de 42 y 43 pesos el kilogramo, de este modo los expendedores de pollos en los mercados de la isla venden el producto a 50 pesos, y cada día los proveedores siguen incrementando el costo del pollo y se desconoce a qué se debe el incremento acelerado, pues anteriormente estaba a 26 pesos el kilogramo de pollo fresco, incrementándose a más del 60 por ciento”, añadió.
Apuntó que hace unos días tuvo una plática con los 60 socios del sindicato que representa porque van a dialogar con el gobierno del estado y autoridades municipales, para preguntar ¿Por qué no se abre la caseta fitosanitaria de Nuevo Campechito para que haya introducción de aves de corral de otras entidades? Ya que los productores de Yucatán a diario le están subiendo el precio al kilogramo de pollo, y no le dan un margen de 15 días para que suba el costo, pues tienen controlado el mercado comercial de la entidad campechana.
Pr-ofeco
“Cuando uno acude a la Procuraduría Federal del Consumidor, lo primero que dicen, que el precio en el kilogramo de la carne de pollo no está regularizado; esos funcionarios deberían de apoyar a los consumidores, no ponerle trabas. Los que nos dedicamos al comercio de pollo tenemos un límite, pues si nos incrementan el costo del pollo, tendremos que subirle al precio al público consumidor; estuvimos manteniendo el precio de este alimento en 45 pesos por varios años, pero ahora vemos que nos está lacerando, por ello lo estamos dando en 50 pesos el kilo”, añadió.
Señaló que el incremento en el precio del kilogramo de pollo ha provocado que baje de forma considerable el consumo, porque un pollo cuesta hasta por 130 pesos, y existen personas que no tienen para comprar y esto les está afectando.
Agregó que el problema del incremento en el precio de la carne de pollo comenzó en el mes de noviembre del año pasado, pero hasta ahora no pueden seguir soportando los incrementos, porque les está afectando masivamente. Además los que son introductores, tienen que conservar los pollos en cuartos fríos, y tienen que pagar a la Comisión Federal de Electricidad (CFE) de forma bimestral hasta 13 mil pesos, pero al reducirse las ventas, se incrementan los costos de producción; desafortunadamente los mismos productores de aves de corral, les hacen competencia con los expendios que tienen en la isla de Carmen.
Monopolio
“Hay más de 200 puestos de Bachoco y Crío, y nos están afectando a los socios del sindicato de aves de corral, y esto se aprecia en el mercado principal “Alonso Felipe de Andrade”, en donde algunos expendedores de pollos solo venden los días que consideran que existe buena venta, en los dos primeros día de la quincena y fin de semana”, finalizó diciendo.
(Texto y fotos: Fernando Kantún)