HOBOMO, Cam, 19 de julio.- Para la comunidad de Hobomó, el acueducto inaugurado es sinónimo de corrupción. A diario observan a su paso las bombas y tuberías que se corroen por el paso del tiempo y donde no sale ni una sola gota de agua, aunque las autoridades estatales siempre les informan que “ya está listo”.
El equipo de POR ESTO! recorrió las instalaciones del acueducto, el cual fue inaugurado por el desgobernador Alejandro Moreno Cárdenas y el ex presidente Enrique Peña Nieto el 18 de abril del 2018. Ahí anunciaron que se había resuelto el problema de suministro de agua potable para la ciudad de Campeche y el nuevo acueducto beneficiaría a más de 230 mil habitantes durante los próximos 30 años.
Ha transcurrido el primer año de vida. Los tanques elevados, las tuberías y el centro de máquinas se han convertido en otro elefante blanco de 1,200 millones de pesos (según la Conagua) y el Ayuntamiento de Campeche asegura no tener notificación de que este año el acueducto entre en funcionamiento, “ni siquiera hemos recibido la obra”, refiere un funcionario del Sistema Municipal de Agua Potable y Alcantarillado de Campeche (Capae).
Los pobladores resumen el hecho en una sola palabra: “corrupción”. “Se robaron el dinero y, como ya se fue Alito, nadie quiere hacerse responsable de poner en marcha el acueducto”.
El logo de “Crecer en Grande” es lo único que ha sido repintado en las paredes de los tanques elevados y del módulo de maquinarias, que luce desolado, sin vigilante y a merced de delincuentes.
A los pobladores de la ex hacienda Hobomó, para evitar que protesten por la instalación de una de las tuberías en medio de la plaza, el Gobierno del Estado les construyó una cancha techada, obra que igualmente está a medias, pero que ya nunca regresaron los trabajadores, mientras sus calles por donde pasa la tubería se desfonda cada vez que llueve.
Sin beneficios
para la comunidad
De acuerdo con datos técnicos, la red hídrica tiene una capacidad para bombear 500 litros de agua por segundo, proveniente de nueve pozos a través de una infraestructura que recorre 26 kilómetros hasta llegar a la ciudad capital. Está conformada por una batería de 15 pozos y 17 kilómetros de líneas de interconexión.
Para el comisario ejidal de Hobomó, Miguel de los Angeles Mex May, esta obra no ha dejado ningún beneficio para la comunidad y sólo les indicaron que tienen una reserva hídrica de gran cantidad y que pagarían los derechos de vía a los propietarios de los terrenos donde pasará la tubería.
Refirió que las más de 500 hectáreas donde pasa la tubería no son terrenos ejidales sino de pequeños propietarios, por lo que no trae beneficios a la comunidad el pago del derecho de vía.
En tanto entra en funcionamiento el acueducto de Hobomó, la ciudad de Campeche se sigue abasteciendo de agua potable extraída del manto freático del poblado de Chiná, mientras la ex hacienda sigue impasible al paso del tiempo.
(POR ESTO! / Campeche)