Ante la apatía de las autoridades por resolver los problemas sociales que hay en la Isla como son los terrenos baldíos, donde proliferan basureros clandestinos, es la misma ciudadanía que se organiza para cumplir con este rol que le corresponde al Gobierno Municipal, y es que vecinos del fraccionamiento Villas de Santa Ana ponen el ejemplo de cuidar lotes baldíos para que no se sigan generando basureros y guaridas de delincuentes.
El predio, propiedad de la empresa Su Casa, que era utilizado como basurero donde incluso se suscitaron varios incendios por la cantidad de desechos que habían, se ha mantenido limpio gracias a los mismos habitantes del fraccionamiento Santa Ana, quienes se han dado a la tarea de delimitar las zonas para que se mantengan sin tanta maleza que además les ha generado demasiada inseguridad.
Y es que de acuerdo al ciudadano José Angel Méndez, ya habían asaltado a varias personas debido a que estaba lleno de maleza y en penumbras, por ello se han estado organizando y cierto determinando tiempo son ellos quienes mantienen el predio sin basura y maleza, ya que el Gobierno Municipal sólo se quedaba cruzado de brazos ante las peticiones de los colonos.
‘Basurero peligroso’
“Este predio ya había sido agarrado como vertedero y entre todos los vecinos hemos tomado la iniciativa de mantenerlo limpio, más que nada porque han asaltado ya a varias personas en ese camino que antes estaba todo lleno de monte, por ello los mismos que vivimos cerca es que nos hemos dado a esta tarea”.
Asimismo, José Angel Méndez indicó que muchas veces pidieron el apoyo al Ayuntamiento, pero que sólo les daban largas y largas y no hacían nada, siendo ellos los afectados, pues no sólo es el tema de inseguridad, sino que además la contaminación que se generaba, ya que ahí tiraban hasta animales muertos.
Cabe señalar que la empresa Su Casa ya ni siquiera tiene oficinas en Carmen, por ello no se hacen responsables de los predios abandonados que son utilizados como basureros clandestinos, los cuales están sobre la avenida Central y Periférica.
(Texto y fotos: Ignacio Morales)