Vecinos de la Ermita, Estación Antigua y Santa Lucía, que viven a la vera de la vía del ferrocarril, nuevamente demandaron en el Palacio de Gobierno la reubicación de las vías, porque se niegan a dejar sus hogares, y pidieron que se les concerté una audiencia con el Presidente de México para exponerles su sentir.
Los habitantes de este sector llegaron en protesta al Palacio de Gobierno con pancartas en las que se podía leer: “No somos invasores, somos pobladores”, “No destruyan nuestro único patrimonio” y también expusieron las mantas que habían colocado en varias viviendas de ese rumbo.
En entrevista previa a la manifestación, Lourdes de los Angeles Ganso Rivera sostuvo que se tiene un proyecto que plantea dos alternativas para la reubicación de las vías férreas que les fue entregado en el 2018.
Señaló que se tienen los estudios de factibilidad, así como los hidrológicos y de impacto del suelo, y con base en ello piden la reubicación de la red ferroviaria sin que se afecte a los ciudadanos.
Expresó que la red ferroviaria atraviesa la ciudad, pero muchas de las viviendas tienen más de dos siglos de historia, por lo que el proyecto afecta el patrimonio y la tradición de los habitantes.
Además, solicitaron al jefe del Ejecutivo Estatal que interceda para que puedan tener una audiencia con el Presidente de la República, y subrayaron que es una persona que escucha a los ciudadanos y los entiende, por lo que están seguros que los apoyará para que reubiquen las vías del ferrocarril.
Manifestó que no desean recurrir a la justicia, como declaró el Consejo Regional Popular e Indígena de Xpujil, para obtener una suspensión provisional al desarrollo del Tren Maya, mediante el amparo que presentaron al Juzgado Primero de Distrito, ya que no quieren llegar a ese nivel de confrontación.
Insistió en que su demanda es la reubicación de la vía férrea y consideran que la pueden lograr sin que tengan que recurrir a un proceso judicial y sin que los responsabilicen de posible afectación a la industria turística ante el servicio que proporcione el Tren Maya a los viajeros en calidad de paseantes.
Sostuvo que el 10 de septiembre del 2019 tuvieron un encuentro con el coordinador federal del proyecto, Xavier García Romero, quien les dio a conocer que ONU-Hábitat les haría una propuesta sobre sus viviendas, pero hasta el momento no se ha concretado y siguen en la incertidumbre porque no conocen lo que pasará con su patrimonio.
No injerencia partidista
Descartó la injerencia de algún partido político, ya que no quieren ningún trato con estas instituciones políticas, porque la petición que hacen es para conservar sus viviendas, el patrimonio de su familia de generaciones, ya que la mayoría desde niños viven ahí, como sucedió con sus abuelos.
Por su parte, Jesusita Pinzón enfatizó que no son opositores ni socialistas, pero defienden su patrimonio ante una posible afectación, porque no sólo es para su patrimonio, sino para todo ciudadano ya que al estar dividida la ciudad por la vía férrea se pueden registrar percances que impacten a cualquiera sobre todo por la velocidad con que transite el tren, reiteró.
Manifestó que existe temor entre los vecinos de que puedan ser agredidos, psicológicamente se encuentran intimidados e incluso, gritó uno de los manifestantes, ya hay gente enferma, por estas condiciones.
Se estima que son al menos 450 familias las afectadas por el recorrido proyectado del Tren Maya en las 7 colonias donde se ubica la vía férrea, quienes señalan que asistirán este sábado para buscar una audiencia con el Presidente André Manuel López Obrador.
(Wilbert Casanova Villamonte)