Campeche

Puerta de Tierra y de Mar, fieles testigos de la historia en Campeche

La Puerta de Tierra y de Mar han sido fieles testigos de la historia. Entre ellas se dio paso al comercio, pero también sirvió de fortaleza.
El campecha antiguo estaba formada por cuatro puertas que significaban la defensa de la muralla. Foto: Alan Gómez

Visitar Campeche y no imprimirse una gráfica en las puertas de Tierra y del mar, es como si no lo hubieran hecho, una de ellas representa la seguridad contra ataques y control de ingreso de ciudadanos en la antigua villa y la otra significaba un valioso punto comercial, por donde arriban mercancías que posteriormente eran trasladadas al resto de la Península de Yucatán y Guatemala.

El historiador y cronista de la ciudad de Campeche, Aarón Enrique Pérez Durán, manifestó que antiguamente existían cuatro puertas en la Villa de San Francisco de Campeche, que por distintas razones se disminuyeron con el cierre de las que conectaban con el barrio de San Román y Guadalupe.

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Destacó que la importancia de las cuatro puertas en el campeche antiguo era por su significado de la defensa de la muralla, el control de entrada – salida de personas y el simbolismo de fortaleza contra cualquier enemigo, ataque y asedio contra la población.

“En el caso de puerta de tierra se tiene un gran elemento, porque la muralla servía para contratacar o defender a la población, es decir, era una defensa de la población de la villa de Campeche”: platicó.

Recordó que la Puerta de Tierra fue construida en 1732, como la entrada principal a la antigua Villa de San Francisco de Campeche. Dijo que este punto representa un simbolismo increíble, por fungir en el Campeche antiguo como una de las partes esenciales en el sistema de fortificación del recinto amurallado y que conectaba con el barrio de Santa Ana.

“La puerta de tierra dista de 187.5 metros desde el baluarte de San Juan, tiene una enorme bóveda muy clara y capaz, con dos departamentos a su derecha e izquierda, también cuenta con otra bóveda de cuerpo de guardia y oficial”: expresó.

Otros detalles arquitectónicos de la Puerta de Tierra son su zona superior de muralla, de plano horizontal que forma una superficie tipo plaza de armas, con cuatro cañoneras apuntando la plazuela y otros al área de campaña. Comentó que sobre la puerta, en la extensión del terreno, hay una curiosa saratana, que servía para la defensa del lugar de las granadas o el fuego, con tres entradas de disposición para el descenso o ascenso del rastrillo.

Explicó que la puerta es de jabín, madera muy dura, grande y capaz con sus fajas de hierro, que por delante cuanta con un revellín de mampostería que lo guarnirse, sin olvidar que también se cuenta con un foso reducido y un puente elevadizo, ya inútil por el desuso.

Comercio portuario de la Puerta de Mar reveló que se tiene un caso interesante, que igual era una defensa de la fortificación amurallada, pero con características y trasfondo económico en beneficio de la villa, al ser el punto donde llegaba toda la mercancía, propiciando que Campeche enfrentara problemas y asedio por una cantidad importante de piratas.

“Es muy importante recalcar que por ambas partes eran defensas de la muralla, pero la Puerta de Mar era la entrada de todas las mercancías con destino al resto de la península y Guatemala, por lo tanto el comercio en el muelle estaba a la par como un puerto”, asestó.

Reveló que la arquitectura de la Puerta de Mar no tenía fosa, custodia, puente o revellín, pero sí contaba con buena capacidad de defensa y una saratana, añadiendo que a la izquierda existía un pequeño cuerpo de guardia para cuatro o cinco soldados. “Según un plano firmado por el ing. Juan José de León, en julio de 1802, se construyó el nuevo cuerpo de guardia de la puerta con dos cuartos y un corredor de 10 metros de frente por seis de fondo”, precisó.

Abundó en que el proyecto del cuerpo de guardia de la Puerta de Mar, dentro del sabor neoclásico, consistía en un pequeño cuarto para el comandante y otro para el cuartel de la tropa, con una gran tarima para el descanso de los soldados y un apoyo para que los vigilantes se pudieran sentar mientras realizaban sus labores de cuidado.

Actualidad Comentó que en la actualidad la Puerta de Mar es una reconstrucción de la real, recordando que a finales del siglo pasado el cuerpo de guardia también se derribó, pero hasta 1955 el gobernador Alberto Trueba Urbina hizo el primer intento de reconstrucción, como parte de las obras de rescate a la imagen perdida del recinto amurallado.

“Algo importante por mencionar de las remodelaciones y reconstrucciones es que muchas son de retoques, como por ejemplo el proyecto de 2013 de rescate al recinto amurallado por la importancia de Campeche como patrimonio cultural de la humanidad, tras el nombramiento desde 1999 por la UNESCO ”: manifestó.

Dijo que el proyecto inició en ese entonces por las características de ciudad barroca colonial, plano reticular regular, trazo urbano, modelo de ciudad portuaria virreinal, así como por su importante papel de enlace comercial, militar y religioso durante el Siglo XVI, bajo un presupuesto federal de 50 millones de pesos ejercidos por el Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH).

También hizo memoria al recordar que el proyecto de 2014 fue dirigido por el arquitecto Salvador Aceves García, donde trabajaron muchas personas de las comunidades campechanas de Chemblas, Lerma, Hampolol y Tixmucuy.

“El proyecto de 2013 tiene importancia por la recuperación y preservación de zonas cercanas a la Puerta de Mar con dirección a la calle 61, donde se limpiaron 76.7 metros de muralla en las zonas del Baluarte de San Juan, San Pedro y San José”, remarcó.

En la zona de la Puerta de Tierra destacó que se resanó el área de lienzo de muralla, donde se encontraba el antiguo estacionamiento del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), así como parte de la fortificación de este punto en la ciudad.

“Eran 200 trabajadores temporales, donde participó gente especializada del INAH y de la UNESCO para mejorar la calidad de vida de 3 mil 615 metros de todo el recinto amurallado y transmitir la memoria del pasado, conservar – reparar las paredes que en su momento protegieron a los habitantes del lugar y recuperar – preservar la memoria histórica de los campechanos”: agregó.

Con información de David Vázquez