Campeche

Estudio busca salvaguardar su integridad

El estudio ejecutivo sobre el Tren Maya, que determinará el número exacto de viviendas que se deben reubicar por la seguridad de las familias en el marco del proyecto federal, busca salvaguardar la integridad de las personas y luego de los inmuebles, planteó el superintendente del proyecto del Gobierno Federal, Xavier García Romero, luego de señalar que otro objetivo es afectar al menor número de predios.

A los vecinos del Camino Real, La Ermita y Santa Lucía los exhortó a sostener pláticas con el Programa de Naciones Unidas para los Asentamientos Urbanos (ONU-Hábitat) de manera individual, para exponer su problemática ya que posteriormente las pláticas serían de manera individual porque así lo marca el protocolo.

Aclaró que no se puede hacer estimaciones ni decir cuántas viviendas deben reubicarse, ya que no se cuentan con los estudios técnicos.

Por ello, señaló que sería una irresponsabilidad hablar de cifras cuando aún no se tiene el documento que especifique cómo serían los lineamientos.

Además, se disculpó si alguna autoridad de otros niveles de gobierno los catalogó de invasores, pero en lo que respecta al Tren Maya, se eliminó ese término al referirse hacia las personas que viven en la cercanía de la vía del ferrocarril.

Y descartó cualquier presión, ya que la postura es de diálogo y de respeto hacia los habitantes, por ello es necesario que tengan información verídica con respecto al proceso de relocalización que se haga con base en los criterios de ONU-Hábitat, aunado a que será decisión personal la que tomen con base en la documentación que les entreguen.

Aseveró que van a dar la cara durante los días en que tengan que exponer los avances y la información que requieran sobre el proyecto.

García Romero también aseguró que no se puede considerar que serán 400 casas las que se derrumbarán cuando no se cuenta con el estudio para determinar cuántas serán las reubicadas, aunado a que también deben tomar en consideración las recomendaciones que reciban de ONU-Hábitat.

Explicó que el 13 de diciembre se emitió la información de ingeniería básica en donde se establece el uso del derecho de vía; sin embargo, este 7 de febrero se lanzó la convocatoria para la licitación pública nacional, con posibilidad de ser de carácter internacional, para contar con el proyecto ejecutivo y de vías férreas mediante el cual ya se podrán conocer los planteamientos técnicos del derecho de vía y de las viviendas que se tengan que reubicar.

Asimismo, reveló que en la visita de unas máquinas similares a las que se pretenden instrumentar son de dos locomotoras y cuatro vagones, lo que sería una extensión de 150 metros, con la posibilidad de siete vagones, además de que a futuro pueda tener varios paraderos durante el recorrido.

¿Qué tanto se usará

de derecho de vía?

En cambio la responsable del tramo Escárcega-Calkiní, Elia Salavarria, reiteró que el estudio ejecutivo es el que determinará qué tanto se va a necesitar de derecho de vía, ya que la ingeniería básica ya se tiene, pero con la licitación se conocerán los detalles técnicos de la obra.

Previamente en entrevista a García Romero, precisó que las áreas en donde se pueden hacer reubicaciones son el Camino Real, La Ermita, Santa Lucía y Bellavista; sin embargo, será el estudio ejecutivo donde se especifique en qué tramos de estas cuatro colonias es donde se haría la relocalización de las viviendas.

Dijo que se hizo un censo en donde se tienen 218 viviendas; sin embargo, se estima que sólo podrían ser de 50 a 70, pero se sabrá con exactitud cuando se tenga el citado estudio.

En el caso de los pescadores, añadió que también se analizan varias opciones para que su reubicación sea en zonas cercanas y no tan retiradas, por la cercanía a su área de trabajo, que es el malecón que se ubica a unos metros de sus viviendas.

(Wilbert Casanova Villamonte)