Aunque a decir del alcalde de Calakmul, Luis Felipe Mora Hernández, la calma reina en su municipio y en la zona limítrofe con Quintana Roo, retornó la sensación de incertidumbre en las comunidades ubicadas en la zona en diferendo ante el recrudecimiento del lío limítrofe entre los estados peninsulares y donde el Gobierno de Campeche ha reforzado su presencia policial y de atención social.
De acuerdo con llamadas telefónicas hechas a esta redacción, ciudadanos que habitan en la franja limítrofe, le ha llamado la atención el hecho de que en los últimos días, han notado una mayor presencia de las policías estatal y ministerial, tanto de Campeche como de Quintana Roo. Además de recorridos de la Guardia Nacional.
Sin embargo, dichos operativos podrían estar más relacionados con acciones emprendidas en contra de grupos delincuenciales que usan el territorio de Quintana Roo como de Campeche para llevar a cabo labores de trasiego de droga.
Una fuente bien informada precisó que los habitantes de la zona limítrofe han estado la mayor parte del tiempo en paz, a pesar de los procedimientos constitucionales iniciados por los gobiernos de los estados de Yucatán, Campeche y Quintana Roo.
Sin embargo, las recientes incursiones de las policías estatales, lejos de propiciar un clima de paz, estaría generando un ambiente de tensión, en las comunidades ubicadas en los límites de los municipios de Calakmul, Campeche y Othón P. Blanco, Quintana Roo, sobre todo en algunos como La Lucha, los Angeles, Veintiuno de Mayo, El Tesoro, Felipe Angeles, etc., debido a que siempre han sido atendidos por uno y otro estado.
La última declaración que al respecto dio a conocer el presidente municipal de Calakmul, Mora Hernández es que campechanos y quintanarroenses comparte amistades, costumbres y lenguaje, pero que nunca podrán ceder territorio.
El edil, refirió que el conflicto limítrofe –mismo que permanecía dormido, hasta que fue revivido en el 2019, a solicitud del estado de Yucatán- puede estar siendo manipulada desde la capital del país, está propiciando conflictos estériles y riesgosos para quienes habitan en esta región, en donde se promete un crecimiento económico en los próximos años.
Es necesario mencionar que los presidentes municipales de la entidad acordaron cerrar filas para defender el territorio ante la intención del gobierno de Quintana Roo de adueñarse de una franja que pertenece a los municipios de Hopelchén y Calakmul.
Los alcaldes advirtieron que si la Federación concede la razón a las autoridades quintanarroenses se cerrarán las carreteras y no se permitirá la construcción del Tren Maya ni de obras federales prioritarias.
Durante una sesión de la Comisión Especial de Asuntos Limítrofes de Campeche, que encabezó el gobernador Carlos Miguel Aysa González, los alcaldes de Calkiní, Hecelchakán, Palizada, Carmen, Candelaria y los directamente involucrados Hopelchén y Calakmul, acordaron consolidar actos de gobierno en la zona en disputa.
Asimismo, avalaron las estrategias de defensa que el gobierno estatal impulsa con base en razones históricas y jurídicas para no ceder ni un solo centímetro. Calakmul y Hopelchén son también parte de Campeche, por lo que tomaremos las medidas que sean necesarias para que no se violente su soberanía, advirtieron.
La consejera jurídica y coordinadora general de la comisión, Olivia del Carmen Rosado, informó la situación que presentó el gobierno de Yucatán contra el de Quintana Roo, donde Campeche tiene el carácter de tercero interesado, ya que mediante el decreto 303 el Congreso quintanarroense modificó su constitución en 2019 e incluyó superficies pertenecientes a Yucatán, así como de Hopelchén y Calakmul.
Quintana Roo pelea 4,810 kilómetros cuadrados de tierra que Campeche afirma le pertenecen histórica y jurídicamente en la zona donde creó el municipio de Calakmul, mientras que Yucatán reclama 5,400 kilómetros cuadrados de tierra. En total son 10 mil kilómetros cuadrados en conflicto, 20 % de los casi 50 mil que tiene de superficie Quintana Ro
(Joaquín Vargas)