Centenares de familias se dieron cita en la explanada del Foro Ah Kim Pech para participar en el tradicional Martes de Pintadera, festejo que pone fin a las carnestolendas de este año y que da paso a la conmemoración cristiana anual con la que se recuerda la pasión y muerte de Cristo.
Desde las 11 de la mañana, en los alrededores del foro las familias empezaron a llegar y se instalaron para ser los primeros en ingresar al área destinada para “jugar a la pintadera”; sin embargo, fue en punto del medio día que la puerta de acceso se abrió a niños, padres y madres, quienes poco a poco iban ingresando al Foro con botellas llenas de agua, otros con frascos de pintura, algunos más con aerosoles y espumas. Todos con un fin: disfrutar del cierre del Carnaval.
En los accesos y salidas no faltaban los comercios que ofertaban gran variedad de pinturas en aerosol y polvo de diferentes colores; aunado a que los mismos vendedores ya estaban con las caras multicolores.
En el escenario, un tecladista local empezaba a amenizar la tarde, mientras abajo los primeros pequeños lanzaban los chorros de pintura, que dicho sea de paso eran de “agua”, los únicos permitidos en la celebración.
El Pulpo
Al filo de las dos de la tarde, el conocido tecladista de música tropical, Alfredo “El Pulpo” saltó al escenario para el júbilo de sus seguidores, que ansiosos ya habían esperado impacientes bajo los intensos rayos del sol a que su música empezara a retumbar para dar paso al tradicional baile.
Ya entradas en las cumbias, las familias no dudaron en lanzarse pintura entre ellos y escarchar a las personas que se encontraban a sus costados para, de manera oficial, iniciar con la guerra de pintura.
Aunque el intercambio de pintura se tornaba por momentos un poco agresivo, los elementos que se encontraban resguardando el perímetro no tuvieron mayores reportes, más que riñas pequeñas y un par de lesionados con golpes leves. En cuanto a los pequeños, sólo se reportaron 3 casos de niños lesionados por la pintura que se aventaban, pero esto no pasó a mayores.
A la orilla del foro, también se encontraban elementos de la Policía Estatal Preventiva (PEP) resguardando la seguridad del artista regional; todos atentos observaban desde su posición estratégica que en la zona delimitada todo se condujera en un ambiente de paz y tranquilidad.
En la periferia de la explanada, la venta de antojitos no podía faltar, los tradicionales chicharrones, papas y refrescos se ofertaban al por mayor. Entre los puestos, también se podían ver familias enteras con los rostros tapizados de colores, pero todos sin excepción con una sonrisa de felicidad marcada de mejilla a mejilla; era notorio que el desarrollo de la celebración era una verdadera fiesta familiar.
El sol caía en el horizonte, se resguardaba en el mar y los pies no dejaban de moverse, el baile en su apogeo y los chorros de pintura no dejaban de ir de un lado a otro; los niños divertidos corrían sin temor y con toda la tranquilidad escabulléndose entre los asistentes en busca de un lugar amplio que les permitiera pintarse a gusto entre un abarrotado foro.
Eran casi las 5 de la tarde y la fila de acceso continuaba una cuadra del acceso. Ya eran casi las 5 de la tarde y los ánimos de entrar a escuchar algunas canciones de “El Pulpo” no se desvanecían. Al final se reportaron poco más de 5 mil asistentes y saldo blanco en incidentes mayores.
Tradición histórica
Pintarse en este día es una de las actividades más divertidas del Carnaval, única en toda la República Mexicana pues sólo Campeche la celebra; es un día en que podemos expresar a través de los colores nuestra alegría por las carnestolendas, una verdadera fiesta de color y tradición es la que se vive el Martes de Pintadera en nuestra tierra campechana.
La Pintadera es, sin duda, una tradición que se resiste a desaparecer. Centenares de “trapazos” empapados con pintura de agua se agitan en el aire como una danza multicolor, en donde amigos, familiares y hasta personas que no se conocen entre sí participan en este festejo tradicional.
Pintarse en este día es una de las actividades más divertidas del Carnaval; es un día en que podemos expresar a través de los colores nuestra alegría. Participar en esta manifestación tradicional forma parte de la cultura campechana, porque en sí, pintarse es tradicional en muchas actividades culturales en otros países, con distintos propósitos y significados.
En general, el Carnaval de Campeche se vive con intensidad y el Martes de Pintadera no es la excepción, pues miles de familias disfrutan de cada uno de los eventos desde hace más de 400 años, razón por la que a nuestro Carnaval se le considera una de las celebraciones más antiguas en México.
(Jorge Chan Ordóñez)