Este año serán contados los niños que puedan celebrar el tradicional Día del Niño con regalos, piñatas y divertidas actividades, debido a la Fase 3 de la pandemia del SARS-COV-2, que ha dejado a las familias sin la solvencia económica para gastar sus pocos ahorros en objetos innecesarios ante el panorama incierto al que se enfrenta el país y el mundo.
Si bien es cierto el 30 de abril es una fecha muy importante para chicos y grandes, este año en particular, será un día común y corriente para algunos niños en situación vulnerable porque papá y mamá prefieren gastar en alimentos en lugar que en juguetes.
Mientras que la población infantil que se encuentra en cuarentena por el COVID-19, se mantendrán en aislamiento porque tampoco tendrán la oportunidad de ir al parque, al malecón, lugares públicos o a la plaza Galerías porque se encuentran en resguardo.
La pandemia del coronavirus ha dejado varias repercusiones, así como se han limitado muchas cosas, y es que esta fecha tan especial para los niños, es tan significativa porque se acostumbra a darles regalos a los niños o llevarlos de paseo y aunque se celebre con mucha alegría, muchos niños están desesperados de no poder salir de sus hogares o convivir con sus amiguitos.
Este año la celebración ocurre en una situación internacional particular, y aunque algunos padres han optado por buscar formas originales para festejarlo, otros más pasarán desapercibidos.
Ejemplo claro, será la familia Gómez, quienes les han organizado a las pequeñas Alinka y Karely, un desayuno especial y disfrutar el día con diversas actividades lúdicas para festejar a las reinas del hogar, así como comprarles pizza y ver películas todo el día.
Para la pequeña Sofía Daniela, su mamá le tiene preparada una sorpresa que adquirió desde el mes de febrero, así que le compró un rico pastel y le hará su comida favorita “espagueti” para festejarla.
Por su parte, la familia Dzib Quen para sus nietas Renata y Pamela, les tienen organizada una piñata para festejarlas y hacerles hamburguesas con papas fritas para que almuercen.
Sin embrago, el panomara es otro para el pequeño Juan Camilo Chan, quien a sus escasos 6 años de edad, sus papás se quedaron sin trabajo por la cuarentena, y tiene que salir a vender con ellos frutas de temporada a la Ría, y aunque el pequeño es feliz en su mundo, la realidad de sus papás es buscar el pan de cada día para que puedan comer.
Mientras que en otros estados limitaron la venta de juguetes por ser considerados productos no indispensables, en Campeche son pocos los comercios que subieron a través del Facebook diversos productos como dulceros, juguetes, desayunos, globos de helio, productos electrónicos, ropa, calzado para vender con servicios a domicilio, pero ante la falta de solvencia económica reportan escasamente 3 por ciento en sus ventas, pues la población está siendo consciente en ahorrar un poco ante la incertidumbre de que nos espera afrontar más adelante con la contingencia.
Por su parte, algunas dependencias han lanzado dinámicas, para obsequiar regalitos con supervisión de los tutores, con transiciones especiales de payasos para los pequeñines.
Y aunque el 2020 ha sido un año difícil para todos, los maestros se han esforzado por demostrarles a sus alumnos cuanto los extrañan y para motivarlos les han mandado videos por whatssap para demostrar su cariño, así como divertidas actividades de disfraces, pijamas, videoconferencias, y por otros medios para festejarlos en su día.
(Karina Gómez)