Locatarios del mercado y trabajadores de bares, cantinas y restaurantes de la capital de Campeche, quienes se quedaron sin posibilidad de ingresos económicos por la pandemia del COVID-19, demandaron de nueva cuenta apoyos al Gobierno del Estado. Los primeros plantean un plan de apoyo crediticio o apertura de sus locales y los segundos la entrega de alimentos.
Pedro Javier Carrillo, uno de los alrededor de 30 locatarios que acudió este miércoles a la planta baja del Palacio de Gobierno para solicitar una audiencia al Gobernador del Estado, Carlos Miguel Aysa González, declaró que con el Ayuntamiento, entidad gubernamental que administra los mercados de la ciudad, ya agotaron las negociaciones y no hubo ningún avance, pues los funcionarios de la Comuna les dijeron que la orden de suspender actividades no esenciales provino de la Comisión para la Protección Contra Riesgos Sanitarios del Estado de Campeche (Copriscam).
“No venimos a pedir limosna. Tampoco queremos migajas, sino que se nos dé una alternativa para trabajar, para poder cumplir con los compromisos que tenemos con nuestras familias”, expuso el locatario, en representación de los locatarios que por tercer día consecutivo se manifestaron frente a las sedes del Ejecutivo Estatal y de la Alcaldía de Campeche.
El comerciante afirmó que los locatarios desde siempre han cumplido con las normas sanitarias que les ha impuesto la autoridad, por lo que no entienden por qué a los vendedores de perecederos se les permite seguir operando, pero no a los abarroteros, expendedores de calzado, ropa, plásticos, relojeros, entre otros.
Enfatizó que no entiende por qué el Gobierno decidió que sean los locatarios de los mercados públicos los que tengan que cerrar sus puertas, dejando todo el mercado para las tiendas de conveniencia y las grandes cadenas de supermercados, negocios que hoy se están enriqueciendo con la pandemia del COVID-19.
Otro locatario que platicó con el reportero de POR ESTO!, pero que pidió no fuera publicado su nombre, expuso que ellos están conscientes de que tienen que cooperar con las autoridades para atajar el paso a la pandemia, pero que el gobierno debe reflexionar y entender que las medidas sanitarias y de seguridad que fueron impuestas están afectando negativamente a cientos de locatarios.
Consideraron que debe existir un plan de acción efectivo y sensato para los micronegocios que tuvieron que ser cerrados y cuyos dueños están gastando sus pocos ahorros para atender las necesidades de sus familias y empleados.
“Tanto el Gobierno Federal como el Estatal anunciaron que como parte de la contingencia se iban a otorgar créditos y apoyos económicos a los microcomercios, pero de eso hasta el momento no ha llegado o no hemos visto nada”, dijo el informante.
Cantineros: “Hay hambre”
Los cantineros son otro grupo de ciudadanos que se manifestó este miércoles en Palacio de Gobierno. POR ESTO! tuvo la oportunidad de platicar con dos de ellos, mismos que no negaron que algunas instituciones y partidos les han hecho llegar algunos apoyos alimentarios.
“Pero con una despensa no podemos sobrevivir. Tenemos familia y la mayoría de nuestras compañeras son madres solteras y sus hijos están pasando hambre, pues no tienen dinero ni para comprar un kilo de frijol y los alimentos cada día están más caros”, expuso.
Otro de los abordados platicó que hace una semana, aproximadamente, el Partido Revolucionario Institucional (PRI) ofreció un apoyo para los trabajadores de bares y cantinas, al cual se inscribieron un total de 500 personas, pero únicamente pudieron apoyar a 150.
“Desde luego, el apoyo es bienvenido, pero la realidad es que es insuficiente”, expuso el trabajador.
Por otra parte, declaró que los dueños de las cantinas se han desentendido de ellos, pues la mayoría de quienes laboran en este tipo de negocios no cuentan con prestaciones y ni siquiera son considerados empleados, situación que ha sido siempre tolerada por las instituciones laborales.
(Joaquín Vargas Aké)