Campeche

El Fondo Nacional de Fomento al Turismo (Fonatur), confirmó que el Tren Maya si pasará en los actuales predios de las colonias el Camino Real, la Ermita y Santa Lucía, al ser la alternativa más viable, propone a los habitantes de esta zona diversas alternativas, entre ellas la compensación económica y asesoría para la construcción o ampliación en su actual predio, edificación en otro terreno de la familia o la compra de viviendas existentes.

Como se recuerda, unas 300 familias de estas tres colonias, han iniciado una resistencia a la reubicación de sus predios, y por el contrario proponen la reubicación de las vías del tren fuera de la ciudad, además de desconocer las propuestas de ONU-Hábitat.

Sin embargo, Fonatur dictaminó que la alternativa más viable para mantener en la capital campechana una estación del Tren Maya es la rehabilitación de la vía ferroviaria actualmente en uso para detonar la actividad económica y prosperidad del estado.

Subraya que la modernización de esta vía implica asegurar una distancia con las viviendas aledañas que permita realizar las obras y la operación del tren sin comprometer la seguridad de los habitantes durante y después de la construcción.

De acuerdo con los trazos finales de la trayectoria del tren elaborados por Fonatur, en el caso de San Francisco de Campeche, los predios se ubican en el lado oriente de la vía, en las colonias Camino Real, Benito Juárez, Bellavista y Santa Lucía, donde se encuentra el cerro del Fuerte de San José el Alto, sin que se requiera afectar las propiedades situadas del otro lado de la vía.

Las propuestas de Fonatur

Para concretar el proyecto, Fonatur compensará de manera justa y adecuada a todas las familias de Campeche que resulten con su predio impactado como consecuencia de estas obras, por lo cual encargó al Programa de Naciones Unidas para los Asentamientos Humanos, ONU-Habitat, la elaboración de un Protocolo de Relocalización Consensuada basado en los mejores estándares internacionales y las directrices de Naciones Unidas en la materia.

El cumplimiento de este Protocolo por parte de Fonatur y de las autoridades competentes, señala que no habrá ningún desalojo forzoso y que las familias participen en la toma de decisiones durante todo el proceso, entre otras cuestiones, por lo cual proponen distintas opciones y soluciones habitacionales, entre las que cada familia podrá elegir.

Entre estas, destaca la compensación económica y asesoría para la construcción o ampliación de una construcción en el predio actual, fuera del derecho de vía, que podría aplicar en muchos de los casos si así lo desean las familias. Esta opción ha sido propuesta por varias familias directamente a ONU-Habitat.

Otras opciones mencionadas por los vecinos son: la construcción nueva en otro terreno propiedad de la familia (a veces incluso en otra localidad), la indemnización económica si ya poseen otra vivienda adecuada fuera del sector o una ayuda de alquiler para quienes actualmente rentan. También se contempla la compra de viviendas existentes en el mercado y la construcción de casas nuevas por parte de Fonatur.

Fonatur no permitirá que nadie saque ventaja

La pandemia de COVID-19 interrumpió las reuniones, asambleas y el censo casa por casa que estaban previstos en marzo, en su lugar, se mantuvieron conversaciones telefónicas con las familias que habían compartido sus números de teléfono o que contactaron en forma voluntaria al equipo local de ONU-Habitat para ser entrevistadas.

Otros encuentros tuvieron lugar en espacios seguros, con medidas de sana distancia, la cual inició el 21 de abril, pero con la Fase 3 de la pandemia a nivel nacional, se suspendieron todas las actividades exteriores.

Cuando  las  condiciones  snitarias  lo  permitan,  aplicando  los  protocolos sanitarios por Fonatur y verificados por la Secretaría del Trabajo, ONU-Habitat, organizará asambleas informativas con las familias que residen a lo largo de la vía del tren.

También continuará las entrevistas con vecinos sobre las características de las viviendas y las condiciones socioeconómicas de quienes viven en ellas, así como su disponibilidad a aceptar el proceso de relocalización y, en dado caso, sus preferencias entre las diferentes opciones que cada grupo familiar proponga.

Sin embargo, aclaran que Fonatur no fomentará ni compensará a personas que busquen establecerse ahora sobre bienes federales para sacar ventaja de estos procesos, lo cual puede implicar sanciones económicas y penales.

Adicionalmente, Fonatur y ONU-Habitat, en coordinación con el Gobierno del estado y el municipio de Campeche, asegurarán que las obras del Tren Maya se acompañen de una mejora de los espacios públicos, servicios públicos y equipamientos a lo largo de la vía, que mejoren la calidad de vida del lugar y beneficien a todos los habitantes y visitantes de esta ciudad.

(Nicolás Guzmán)