Los residuales sólidos urbanos son un problema latente, mientras el relleno sanitario ni siquiera puede cumplir con la NOM-083-Semarnat, ya que es necesario que esté a 80 metros alejado del manto freático y no hay ningún lugar en la Isla que tenga esa altitud, señaló Marco Antonio Rodríguez Badillo, fundador e integrante de Marea Azul A.C. y de Red Manglar México e Internacional.
“Es imposible que se cumpla la normatividad ambiental, la propuesta es que se reubique el basurero hacia una zona alta donde se pueda cumplir el protocolo, esta puede ser por Chekubul”, afirmó.
Es urgente, dijo, que se cumpla con la norma, ya que aproximadamente el 40 por ciento de la población consume agua de pozo, a diario arrojan 200 toneladas y los lixiviados afectan el manto freático.
El problema del basurero ubicado en la carretera federal 180 km 12+900 tramo Ciudad del Carmen-Puerto Real trae repercusiones sociales, porque en cualquier momento puede haber una epidemia de coliformes por la descomposición y liberación de componentes contaminantes de los residuos.
Es importante contar con las membranas para captura de lixiviados, con las que se evite la afectación de la naturaleza, para que cumpla con la legislación vigente de rellenos sanitarios, de lo contrario, es un tiradero a cielo abierto con todas las consecuencias negativas que esto conlleva.
“Esto también repercute en que prolifere fauna nociva, que afecta a la salud o a la naturaleza, toda vez que los lixiviados contaminan toda el agua del subsuelo”, aseguró.
Apuntó desde hace 20 años la asociación civil crea propuestas para fomentar el reciclaje, pero no existe esta cultura, ya que no hay voluntad de los tres niveles de gobierno para que se lleve a cabo.
“Calculamos que se podría reciclar un 60 por ciento de las 200 toneladas, 40 serían llevadas al relleno sanitario para su destino final, para la Isla esto debería ser una prioridad, ya que vivimos en un área natural protegida”, acotó.
Por Irene Barradas