Barcos camaroneros que cuentan los armadores de Ciudad del Carmen, obtienen capturas de 80 a 100 kilos por noche en las Aguas de Tamaulipas y en la Sonda de Campeche, producción que solo sirve para recuperar la inversión del combustible, así lo informó, El presidente de la Federación de Cooperativas Pesqueras de Altura, Adolfo Hernández Maldonado.
Explicó que el mal tiempo que predomina en el estado de Tampico imposibilita la pesca de camarón, zona donde se encuentra la mayor parte de las embarcaciones del estado, así como de los ocho navíos con que cuenta la Isla de Carmen, y por las condiciones climáticas los barcos están fondeados en el Puerto, y la pesca la realizan solo en dos o tres días por semana.
Indicó que a pesar de que la captura es baja, los navíos tienen que salir a trabajar, ya que las embarcaciones se deterioran al estar por mucho tiempo varados en puerto; aunado a la poca producción se suma la falta de mercado para la comercialización del crustáceo pese a que el kilogramo oscila entre 130 a 140 pesos en esta temporada de cuaresma, y esto se debe a la cuestión económica provocada por la pandemia.
Señaló que en la Sonda de Campeche la producción también es baja y se suma el alto costo del diésel, por ellos, los armadores de la Isla y Campeche, prefieren enviar los navíos a Tamaulipas, debido a que los barcos los cargan de combustible a la Frontera de los Estados Unidos como, Brooklyn, donde el precio del energético es de 13 pesos el litro, mientras en el país es de 21 pesos.
“Además el diésel que compran del vecino país es de color rojo y eso no lo venden en México, por ello cuando los barcos son revisados por la Armada, los hombres del mar evitan a que la vigilancia diga que el combustible proviene del huachicoleo”, aseguró el líder de los pescadores de altura.
Por otra parte, Hernández Maldonado, dijo que en cuanto a los productores de mojarras tilapias que tienen los estanques y tinas en la comunidad de Jobal venden el kilo de pescado a 55 y 60 pesos, sin embargo, la venta de este producto también ha sido bajo y se debe a la falta de mercado, así como de las malas condiciones del camino para ingresar a la granja acuícola.
“Tenemos una entrevista pendiente con el presidente municipal, porque se comprometió con los productores de mojarras en el mes de noviembre pasado, que iba a reparar el camino a Jobal, pero no se ha concretado, ya que el acceso a la granja se encuentra deteriorado y no entra las unidades motrices para comprar el producto”, compartió.
GCS