La demanda de agua potable de 650 litros por segundo que requieren 230 mil habitantes en el municipio Hobomó, Campeche, es una necesidad que aún no puede satisfacer la Comisión de Agua Potable y Alcantarillado del Estado (Capae) tras tres años de retraso en la entrega del Acueducto de Hobomó al Sistema Municipal de Agua Potable y Alcantarillado de Campeche (Smapac), obra hídrica que registró un costo superior a los 480 millones de pesos y que desde su inauguración a la fecha ha registrado siete robos con afectaciones superiores a los dos millones 180 mil pesos pagados por el Gobierno del Estado en trabajos de reparación.
La obra fue anunciada en durante julio de 2013 por el exgobernador de Campeche Fernando Ortega Bernés y “concluida” a mediados de 2018, hecho al cual precedido un periodo de prueba que fue interrumpido sin nuevas operaciones hasta lo transcurrido de 2021.
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Fuerte inversión
Respecto a los gastos al principio la Comisión Nacional del Agua (Conagua), por conducto del exdirector nacional David Korenfeld Federman; anunció una inversión de 360 millones de pesos, cifra que incrementó en 480 millones, 120 millones más.
Cabe recordar que el objetivo de la obra era garantizar el suministro de agua potable a los habitantes del municipio de Campeche durante los siguientes 30 años.
Respecto a la obra los detalles técnicos indican que se diseñó para proporcionar 500 litros por segundo de agua en la zona de captación del ejido de Hobomó, donde se realizaron trabajos de perforación y equipamiento de 15 pozos, con presión promedio por cada uno de 45 litros por segundo.
Proyecto
También se construyeron líneas de interconexión entre los pozos de las zonas norte y sur, con extensión de 10.56 kilómetros; ello bajo el objetivo de conectar con la planta de bombeo.
Igual tiene una línea eléctrica para los pozos y planta de bombeo con capacidad de mil metros cúbicos, equipada para 500 litros por segundo, así como un tanque unidireccional de 60 metros cúbicos de capacidad y un tanque de cambio de régimen con una capacidad de 80 metros cúbicos, entre otras cosas.
Inicio de los problemas
Parte de la falta de operación del acueducto de Hobomó, según la CAPAE, es por los robos registrados contra el proyecto, pues desde su inauguración a la fecha se han detectado siete actos vandálicos.
El robo que más sobresalió fue el primero, durante el 17 de mayo de 2018; cuando gente a mano armada irrumpió en el lugar y generó la suspensión de proceso de estabilización de la obra, pese a contar con posibilidades de operación.
También se debe recordar que los otros robos se registraron durante febrero de 2019; el 16 de abril de 2019; el 25 de noviembre de 2019; el 27 de noviembre de 2019 y el último el dos de enero de 2021.
Seguridad
Tras las incidencias y daños detectados se decidió por la CAPAE, en coordinación con la Secretaría de Seguridad Pública de Campeche (SSP), ejecutar una estrategia de vigilancia en los puntos donde ocurrieron los delitos.
Así como contratar pobladores para que realicen rondines y se organicen en labores de vigilancia y cuidado de la obra hídrica.
Cabe recordar que los siete robos suman daños por dos millones 180 mil pesos por concepto de mantenimiento, adquisición y remplazo de equipo solventados por el Gobierno Estatal de Campeche, indicó CAPAE.
Cabe recordar que la obra cuenta con 15 pozos equipados y ubicados en áreas sin habitantes, situación por la que la CAPAE adjudicó las afectaciones por actos vandálicos.
También se considera que la obra tendrá siete pozos más para garantizar una capacidad de mil litros por segundo de bombeo de agua potable, lo cual superaría lo estimado para abastecer de agua al municipio, 650 litros por segundo de acuerdo con la Smapac;.aunque el plan hasta el momento no ha dado muestras de responder a los programados hace ocho años.
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GH