El delito de abigeato es uno de los que más resienten los ganaderos de la entidad y en Palizada estiman que las pérdidas pueden oscilar en los 8 millones 500 mil pesos al robarse unas 500 reses al año, estimó el productor Rubén Balam Eligio al precisar que tienen un costo de 17 mil pesos por animal.
En la marcha a que convocó la Unión Ganadera Regional en demanda de seguridad por los delitos que registran los criadores de ganado, pero sobre todo ante los asesinatos recientes de productores, en este 2024, del también arrocero Emiliano Vázquez Rosas, el delito de abigeato en voz de los ganaderos sigue siendo uno de los principales que los afectan.
En entrevista al respecto, Balam Eligio, incluso afirmó que el delito del secuestro aún persiste entre los ganaderos, aunque en la zona del municipio de Escárcega es donde existen casos, aunque no especificó si hay hechos recientes de este delito. Demandó mayor seguridad para la actividad ganadera, ya que “el abigeato está a la orden del, día y de noche”, actualmente hay “mucho abigeato”.
Planteó que este delito “nos cuesta mucho”, sobre todo al ser un patrimonio de los productores y algunos casos “es un patrimonio de 50 a 100 años” que heredaron ya sea de los “abuelos, o de nuestros padres que nos dejan” y que los actuales propietarios continúan con la actividad.
Estimó que al menos en la región de Palizada les roban unas 500 reses anualmente, lo que les genera un impacto económico a los productores de la zona ante este delito que no disminuye. “En toda la región, casi roban más de 500 reses al año” apuntó.
Actualmente, el precio de un animal es de 16 mil a 17 mil pesos, por lo que el robo de 500 reses les generaría pérdidas de 8 millones 500 mil pesos, aunque de acuerdo con el producto son más de 500 animales los que les roban.
Indicó que la sustracción ilegal del ganado es en diversas comunidades del municipio como son los de Santa Adelaida, el Juncal, entre otros.
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KR