El incremento de sindicatos“patito” o que carecen de reconocimiento por parte de la autoridad en la materia como lo es el Centro Federal de Conciliación y Registro Laboral (CFCRL) en Ciudad del Carmen, limita las opciones de trabajo a las agrupaciones legalmente constituidas, pues rebajan precios para poderse quedar con obras del sector privado y público, señaló María Lorca Hernández Jiménez, secretaria del Trabajo del Sindicato de la Construcción en General, adscrito a la Confederación General de Trabajadores (CGT).
A principios de año se generó una polémica en cuanto a los sindicatos de la construcción en el municipio de Carmen, cuando alrededor de seis se unieron para solicitar que sean tomados en cuenta para los trabajos de mantenimiento del Puente Zacatal, y en el que quedó expuesto que de estos la mayoría no cuenta con Toma de Nota, es decir, los sindicatos “patito” no sólo afectaron el inicio de estos trabajos, sino que las obras que se tienen.
Hernández Jiménez señaló que la presencia de más sindicatos de alarifes o de la construcción les afecta, pues ocasionan el descenso de la mano de obra de los sindicatos debidamente constituidos.
Destacó que como sindicato se han visto afectados por estos sindicatos que se hacen pasar como legalmente constituidos, es decir, que están reconocidos por el Centro Federal de Conciliación y Registro Laboral (CFCRL), pero no es así, y les disminuye las oportunidades a los agremiados del CGT.
Comentó que en lo que va del año, las oportunidades laborales se han mantenido regulares, sobre todo con las obras del sector privado, “ha habido obras, pero muy pocas, y estas son particulares; también en este sector la mayoría ya tiene sindicatos; es decir, que a nosotros nos dejan muy poco porque ellos traen trabajadores de otros lados y sólo contratan algunos locales”.
Además, expone, que muchos empresarios o quienes inician proyectos de construcción, ya sea que contratan a sindicatos de dudosa reputación, hay quienes evitan hacer convenios con sindicatos, sino que lo hacen con el propio trabajador a fin de no pagarle lo que realmente le deben de pagar,“además, el hecho de trabajar con un sindicato al empresario-patrón se le obliga a cumplir con la ley, no sólo en el hecho de pagar el sueldo acorde al trabajo, sino que darle las prestaciones debidas, como lo es seguridad social y seguridad personal, es decir, darle guantes, lentes, fajas, uniformes u overoles, como parte de las medidas de protección, es porque a veces no hacen convenios con nosotros”.
Asentó que en la mayoría de los casos, donde hay obras medianas y grandes, ya sea que vengan con sus propios sindicatos o que contraten de manera directa a los trabajadores, donde les pagan medianamente y sin seguridad social, cuando se les debe de dar porque es un trabajo de alto riesgo.
De igual forma, dijo que en lo que se refiere a la obra pública, sobre todo del Ayuntamiento ha sido poco, sobre todo en la pavimentación de calles con concreto hidráulico, “en la mayoría, también, los empresarios o dueños de las constructores que ganan los concursos o a quienes se les asignan los contratos, consideran que no es necesario hacer convenios con los sindicatos porque les generaría pagar, además no lo hacen porque son foráneos, es decir, no se queda el dinero en la Isla al no contratar a los obreros carmelitas”.
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JY