Los pescadores de Campeche enfrentan una creciente amenaza de asaltos por piratas modernos, principalmente en las zonas limítrofes con Tabasco y Yucatán. Ante esta situación, se han implementado estrategias como evitar áreas peligrosas y mantener apagadas las luces de las embarcaciones durante la noche, aunque esto puede aumentar el riesgo de accidentes.
El uso de armas para defensa es poco común entre los pescadores, ya que portar una sin el debido permiso conlleva sanciones legales. La Marina Armada de México explicó que las armas exclusivas de las fuerzas armadas son remitidas al Ministerio Público, mientras que las de menor calibre implican multas administrativas.
Santiago Jiménez González, presidente de la Cooperativa de Pescadores Ribereños del Carmen, denunció el desinterés de las autoridades en atender los casos de robo y agresiones. Relató que los afectados deben prácticamente realizar las investigaciones por su cuenta para identificar a los responsables, ya que la Fiscalía del Estado de Campeche no actúa sin datos específicos.
Los pescadores también enfrentan el robo de motores, lo que ha llevado a algunos, como los del muelle del 7 de Agosto, a contratar guardias de seguridad. Sin embargo, en otras áreas como Camino Real, Lerma y Seybaplaya, los robos continúan afectando a los hombres de mar.
Jiménez González advirtió que la falta de acción en el pasado permitió que los delincuentes, conocedores de los horarios y equipos, continuaran operando con impunidad. Los pescadores exigen que la Fiscalía y las autoridades estatales actúen para frenar los asaltos y proteger la actividad pesquera.
JGH