Un trabajador de la Tortillería "El Almendro" en Ciudad del Carmen, fue golpeado en el rostro por personal de la empresa refresquera Pepsi, luego de que este saliera en defensa de su patrona a quien insultaban con palabras altisonantes. Directivos de la compañía se negaron a recibir a los afectados, argumentando que la riña se dio en la vía pública. Cerca de la 10:00 horas, María Cetina Custodio, propietaria de este establecimiento, recibió la llamada de su trabajador en la que se le daba a conocer, que Sebastián Hernández, preventista y Juan Marín García, supervisor de la Pepsi, había acudido para retirar un enfriador y garrafones de agua, entre ellos, cinco que son de su propiedad. Al llegar al sitio se percató que había levantado los garrafones de su propiedad, por lo que encaró al personal de la empresa, quienes la cuestionaban sobre cómo había adquirido los mismos.
Ante la amenaza de los empleados de retirarse del lugar con los garrafones de su propiedad, Cetina Custodio interpuso su camioneta y su empleado una motocicleta para evitar que se fueran. Luego de una fuerte discusión, los empleados de la refresquera ordenaron bajar los garrafones, lo que provocó que el chofer y sus ayudantes, comenzaran a insultarlos con palabras altisonantes, ante lo que el empleado de la agredida les pidió respeto. Este fue el motivo por el cual comenzaron a insultarlo, mientras que el preventista y el supervisor evitaba que se liaran a los golpes, sin embargo, uno de ellos detrás de sus superiores, lanzó un golpe al rostro del empleado, que se proyectó ensangrentado al suelo.
Ante estos hechos, los trabajadores de la refresquera aprovecharon el momento para darse a la fuga del lugar. Los afectados se presentaron en las oficinas de la refresquera, para solicitar hablar con el gerente de la misma, el cual se negó al dialogo, argumentando que se trató de un incidente registrado en la vía pública. Los afectados refieren que hasta ahora, se han gastado más de mil 800 pesos en la atención médica y fármacos, para aliviar las lesiones en la vista, nariz y rostro del empleado.
Por José Pacheco