Marco Antonio Sánchez Solís
El básquetbol yucateco está de luto por el sensible fallecimiento de uno de los mejores jugadores que ha tenido el Estado, Raúl “Huero” Rodríguez Berzunza.
El gran “Huero” Rodríguez falleció la noche del jueves haciendo lo que más le gustaba, jugando baloncesto, en el Gimnasio Polifuncional, en el torneo de veteranos de ese inmueble.
Al parecer, según pudimos averiguar, Don Raúl, de 63 años, se presentó a jugar en la noche del jueves, pero cuando se agachó para agarrar una pelota cayó de espaldas por un infarto, de inmediato se pidió la ayuda de una ambulancia, la cual, al parecer, tardó cerca de media hora en llegar.
Mientras llegaban, sus compañeros le dieron reanimación cardiovascular, pero al llegar los paramédicos se dieron cuenta que no respiraba, al hacerle una revisión de las vías aéreas a través de la garganta, la encontraron obstruidas por un chicle.
El “Huero” fue trasladaron a un hospital donde a pesar de que los médicos lo trataron de reanimar, ya no pudieron hacer nada por él, ya que su corazón ya estaba minado por un par de infartos previos, aunado al tiempo sin oxígeno que pasó por el chicle que siempre lo acompañaba en los partidos.
Raúl “Huero” Medina es uno de los más emblemáticos, y mejores, jugadores de básquetbol que ha tenido el Estado, considerado dentro de los 5 mejores que ha tenido Yucatán, esto por ser un jugador muy completo y muy versátil, pudiendo jugar de poste, de ala o de movedor.
Es parte de la generación que dio comienzo al Circuito de Básquetbol Peninsular (CIPEBA) con los Gavilanes del IMSS.
Gran jugador, pero mejor persona, fue parte importante, como jugador, del Instituto Tecnológico de Mérida, y de la selección yucateca de Primera Fuerza; ídolo de muchos y maestro de otros.
La familia basquetbolística se ha manifestado con dolor por el sensible fallecimiento de este emblemático personaje, que hasta el final de su vida practicó el deporte que amaba.