Prematuro adiós a un gran entrenador
Humberto Blanco
El Fútbol yucateco tuvo ayer una gran pérdida con el sensible fallecimiento del LEF Mario Ricardo Toledo Cetina (1988-2020), quien a sus escasos 32 años de edad ya tenía un gran camino recorrido en el ámbito del fútbol y en sus últimos años se dedicó precisamente a transmitir su experiencia vivida en las canchas a las futuras estrellas del balompié local.
Desde muy chico, Toledo Cetina llevaba el Fútbol en la sangre, y es por eso que se dedicó a esta disciplina en cuerpo y alma. A sus 17 años de edad militó en el Fútbol profesional al formar parte de la organización del FC Itzáes de la Zona Uno de la Tercera División, en donde defendió a capa y espada los colores aborígenes en donde tuvo gratas experiencias.
Después de saborear las mieles del profesionalismo, Mario Ricardo, sabía que el deporte era su vocación por eso decidió tomar la carrera de Licenciado en Educación Física, estudios los cuales concluyó con éxito, además de que los estudios los conjugó con su principal pasión que fue el Fútbol, pero ahora en el ámbito amateur, en donde defendió los colores del Real Ermita-Rayados, de la Primera Fuerza Estatal, cuando el conjunto de la Pandilla hizo convenio con la organización de los Rayados de Monterrey en su filial de Mérida.
También tuvo un paso por la Liga Premier de Primera Fuerza Estatal.
Toledo Cetina tenía la vocación de enseñar y es por eso que apenas concluyó su carrera profesional se avocó en el área docente, en la que impartió clases de educación física en las escuelas “Agustín Vadillo Cícero”, “Alianza de Camioneros” y en la Secundaria de Bellas Artes.
Como entrenador estuvo en la organización de Rayados Mérida, en categorías infantiles.
Pero estuvo muchos más años en la Liga Nacional Juvenil, mejor conocida como Cuarta División Nacional, en donde formó parte de los cuerpos técnicos de organizaciones como Deportiva Venados, Cantera Venados y su última escuadra fueron los Tuzos de la García Ginerés, en la que fue auxiliar por muchos años del técnico Afif Chikani.
Le sobreviven su pareja Jenny Cocom y 3 hijos.
Gente del Fútbol yucateco, familiares, amigos se unen a la pena que embarga a su familia y expresa sus más sentidas y deseando una pronta resignación a sus seres queridos por tan irreparable pérdida.
Descansa en Paz, ahora estás en una mejor cancha en donde recibirá el abrazo de gol hasta el cielo.