Este 19 de octubre se conmemora el Día Mundial contra la Lucha del Cáncer de Mama, esta terrible enfermedad que no respeta género, edad, ni estatus social.
En el mundo del deporte diversas atletas se han visto atentadas por este tipo de cáncer que se ha convertido en el más común a nivel mundial, sobrepasando al de pulmón, que durante más de 20 años fue el más extendido y mortal.
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En la vida atlética muchas han podido presumir que sus mayores victorias no son dentro de un terreno de juego, sino en un quirófano, debatiendo entre la vida y la muerte por una repentina enfermedad.
A la jamaiquina Novlene Williams-Mills le diagnosticaron cáncer un mes antes de los Olímpicos de Londres 2012. La velocista ganadora de bronce en la prueba de 4x400 metros en Atenas 2004 y plata en 2008 tendría un nuevo plan: pelear por su vida. Instalada en los Juegos de Londres, Inglaterra, volvió a subir al segundo puesto del podio, consiguiendo su tercera medalla olímpica en su carrera.
Tres días después de pisar el podio de Londres, pasó por el quirófano. Le esperaban tres operaciones más. Tras la primera, quedaron células cancerosas. El tumor se había reubicado en la caja torácica. Volvió al quirófano.
Y, en enero de 2013, ya no había rastro de cáncer en su organismo. Con una energía diferente, empezaba a preparar la temporada en noviembre. Su primera carrera después de lo sucedido fue en Kingston, el 5 de mayo. Fue tercera en los 400 metros. En junio llegaron los Nacionales de Jamaica, donde Williams-Mills ganó la final de los 400. El 30 de agosto, Novlene Williams-Mills tocó la gloria en el Campeonato del Mundo de Beijing tras ganar su primer oro. Y en 2016, repitió plata olímpica en Río.
Otra vencedora, la española Natacha López, se enfrentó a la carrera más importante de su vida, un cáncer de mama que le fue diagnosticado en 2015, en plena preparación del maratón de Valencia. Desde que recibió la noticia cruel, se puso como objetivo superar la enfermedad. Seguía su tratamiento mientras corría y competía.
Con ese incesante ánimo, logró vencerlo. Posteriormente, ella y su marido corrieron más de 700 días continuos, han realizado todas las carreras de su comunidad natal Valencia y han corrido 15 maratones en un año. Desafío al que nombraron Reto 42Kancer, el cual arrancó el 14 de mayo de 2017 hasta el 13 de mayo de 2018. Fue su manera de celebrar la batalla ganada.
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JG