Deportes

Ana Gabriela Guevara concluye su gestión en la Conade tras 2,130 días, defendiendo su labor y sin arrepentimientos ante las controversias.

Ana Gabriela Guevara, la exvelocista olímpica que durante los últimos 2,130 días dirigió la Comisión Nacional de Cultura Física y Deporte (Conade), ha puesto fin a su controvertida gestión al frente del organismo rector del deporte en México. En un acto de entrega de estímulos a deportistas, Guevara aprovechó para hacer un balance de su administración, defendiendo su labor y rechazando las acusaciones que han marcado su paso por la institución.

Desde su nombramiento en 2018, Guevara ha estado en el ojo del huracán, enfrentando críticas por su falta de título profesional y acusaciones de mal manejo de recursos. Sin embargo, la exatleta de 47 años asegura que sale con la conciencia tranquila: "No me sentí intocable. Hoy en este momento no existe ninguna denuncia hacia mi persona. No hay inmunidad ni sobreprotección", declaró, subrayando el respaldo constante que recibió del presidente Andrés Manuel López Obrador.

Una de las controversias más sonadas durante su gestión fue la relacionada con el equipo de natación artística, cuando sugirió que las atletas "vendieran calzones" para financiarse. Lejos de retractarse, Guevara defendió su postura: "El punto medular de estar al frente de la institución no se torna en sentimentalismos. Mi cercanía, mi afecto y mi empatía hacia los deportistas radican en otro sentido".

Ana Guevara manda mensaje a Rommel Pacheco

La salida de Guevara coincide con el nombramiento de Rommel Pacheco, exclavadista olímpico, como su sucesor por parte de la presidenta electa Claudia Sheinbaum. Ante este cambio, Guevara se abstuvo de dar consejos a Pacheco, limitándose a señalar que "no hay nada que explicarle a la nueva administración que no esté asentado en los documentos que dejaremos".

Respecto a su futuro, Guevara mantuvo la incertidumbre: "No me hago expectativas para no sufrir, seré paciente. Tomaré la decisión de lo que sigue en los siguientes días". Sin embargo, enfatizó su compromiso de entregar la institución "con números negros y sin ninguna alarma de ninguna índole".

La gestión de Guevara deja un legado mixto. Por un lado, su administración se vio empañada por acusaciones de mala gestión y falta de empatía hacia los atletas. Por otro, la exvelocista argumenta haber trabajado incansablemente por mejorar las condiciones de los deportistas mexicanos.

El cambio de estafeta en la Conade plantea nuevos desafíos y expectativas. Rommel Pacheco, con su experiencia como atleta olímpico, tendrá la tarea de abordar los problemas pendientes, especialmente en lo referente a los deportes acuáticos y las relaciones con las federaciones deportivas.

Mientras el deporte mexicano se prepara para esta nueva etapa, la salida de Ana Gabriela Guevara marca el fin de un periodo turbulento pero significativo en la administración deportiva del país. Su legado, para bien o para mal, seguirá siendo tema de debate en los círculos deportivos y políticos de México por un tiempo considerable.

AG