El diagnóstico de la mordedura de una araña violinista no es sencillo ni siquiera para los especialistas. Incluso un toxicólogo, experto en atender intoxicaciones por venenos (en este caso el de la araña) puede tener dificultades para afirmar que se trata de una lesión provocada por este temido arácnido.
La dificultad radica en que el tipo de lesión que produce también puede generarse por muchas otras causas como picaduras de otros insectos o algunas enfermedades; sin embargo, existen algunas señales que podrían alertarte, las cuales son explicadas por la toxicóloga Leslie Moranchel, del Centro toxicológico del Hospital Ángeles Lomas.
En primer lugar es importante mencionar que al momento de la mordedura no se produce dolor, por lo que no sabrás que has sido mordido hasta seis o 12 horas después, tiempo en que comienzan a sentirse los primeros síntomas. Al transcurrir este tiempo, puedes comenzar a sentir ardor, inflamación y la piel comienza a enrojecerse. Si la lesión evoluciona, es posible que aparezca algo que los especialistas llaman placa livedoide o signo de la bandera francesa.
Se trata de una herida con un centro negro azulado, seguida de un halo blanco (provocado por una mala circulación de sangre en la zona) y luego por un halo rojo provocado por la hinchazón.
Si bien esta herida puede aparecer por diversas causas, si ocurre después de haber realizado limpieza, haberse colocado ropa guardada o de estar en algún jardín se puede pensar en una posible mordedura, y ante la sospecha, es importante acudir de inmediato con el especialista.
A pesar del dolor que puedas sentir, recuerda no aplicar absolutamente nada sobre la lesión. Cualquier sustancia que coloques puede alterar la herida y complicar el diagnóstico. Aunque muchos recomiendan colocar hielo tampoco lo hagas, el veneno de la araña provoca que los vasos se cierren y haya mala circulación, el hielo posee el mismo efecto por lo que acelera el efecto del veneno.
Ante las primeras sospechas acude de inmediato a revisión ya que postergar el diagnóstico aumenta las complicaciones. De ser posible, pide que te revise un toxicologo, ya que están mejor preparados para poder realizar un diagnóstico y establecer un tratamiento. (El Universal)