El 14 de noviembre es un día especial para los millones de personas que viven condiabetes en todo el mundo. En este día se conmemora el natalicio de Frederick Banting, considerado el padre de la insulina y cuyos descubrimientos revolucionaron el tratamiento de esta enfermedad.
En honor a su legado, la Organización Mundial de la Salud (OMS) designó esta fecha como el Día Mundial de la Diabetes, con el objetivo de concienciar sobre los peligros de esta temida enfermedad.
Legado de Frederick Banting
Noticia destacada
Quintana Roo registra casi 5 mil casos de diabetes en 2023; 162 son mujeres embarazadas
Frederick Banting nació el 14 de noviembre de 1891 en Alliston, Ontario. Su pasión por la medicina lo llevó a dejar de lado sus estudios de teología en la Universidad de Toronto y dedicarse por completo a la ciencia médica. Después de obtener su título, se unió al cuerpo médico del ejército de Canadá y sirvió en Francia durante la Primera Guerra Mundial.
Fue durante su tiempo en el frente de batalla cuando Banting realizó un acto heroico que quedó grabado en la historia. A pesar de sufrir graves heridas en combate, atendió incesantemente a su batallón durante 17 horas. Por esta valiente acción, fue condecorado con la exclusiva Cruz Militar. En 1919, al finalizar la guerra, regresó a Canadá y continuó ejerciendo como médico en Ontario y Toronto.
Fue en esta etapa de su vida cuando su interés por la diabetes y su relación con el páncreas comenzó a crecer. Banting sabía que la diabetes era causada por la deficiencia de una hormona segregada en el páncreas, pero muchos otros médicos habían intentado sin éxito aislar esta sustancia. En 1921, Banting presentó sus suposiciones al profesor John Macleod de la Universidad de Toronto, quien le ofreció un pequeño laboratorio universitario, 10 perros como sujetos de experimentación y la ayuda de un joven asistente llamado Charles Best.
¿Cómo fue el descubrimiento de la Insulina?
Banting y Best comenzaron sus experimentos extirpando el páncreas de algunos perros y observaron cómo los animales desarrollaban los síntomas de la diabetes, como el aumento del nivel de azúcar en la sangre y la debilidad. Luego, mezclaron el páncreas de otro perro con agua y sales, lo congelaron y lo filtraron. Este proceso les permitió aislar la hormona pancreática, a la que inicialmente llamaron "isletin".
Síguenos en Google News y recibe la mejor información
LG