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WASHINGTON, EE. UU., 27 de enero (AP). En la primera prueba del año de un gobierno dividido, la primera ronda se la llevó Nancy Pelosi. Y ni siquiera hubo tanta competencia.

Cuando el cierre parcial del gobierno estadounidense comenzó antes de Navidad –durando 35 días, un récord– Pelosi estaba a un mes de ser electa líder de la Cámara de Representantes. Para ganar el puesto, tuvo que superar los argumentos de los críticos de que la veterana legisladora de 78 años había sido líder de partido demasiado tiempo y no era la mejor apuesta de los demócratas para atraer audiencias diversas y entendidas de las redes sociales.

Para cuando el presidente Donald Trump se rindió el viernes, poniendo fin al cierre del gobierno, la imagen de Pelosi era más resistente y formidable que hace un mes. Ella mantuvo a los demócratas unidos mientras crecía la presión pública para poner fin al cese de labores del gobierno. Además se enfrentó a Trump varias veces, cuestionando su inteligencia (“Démosle un tiempo para pensar, oh, pensar, ¿dije pensar?”) e incluso ejerciendo su poder como líder de la cámara baja para impedirle al mandatario usar el recinto para dar su informe sobre el Estado de la Unión planeado para este martes.

Trump cerraría otra vez

el gobierno

Dos días después de que un cierre gubernamental récord llegó a su fin, la Casa Blanca especificó claramente el domingo que el presidente Donald Trump está preparado para otro cierre si no alcanza un acuerdo con el Congreso para erigir un muro en la frontera con México.

El impasse del mandatario con los demócratas está lejos de haber terminado y el reloj sigue su marcha: la iniciativa de ley que Trump promulgó el viernes sólo proporciona fondos para las agencias del gobierno hasta el 15 de febrero, luego de que estuvieron cerradas 35 días.

No se sabe si los demócratas cederán. Trump pareció preparado para seguir luchando, enviando una serie de mensajes en internet que presagiaban el próximo pleito con los legisladores.

“¡Construyan un muro y los delitos disminuirán!”, tuiteó.

¿Está Trump preparado para cerrar otra vez el gobierno en tres semanas?

“Sí, creo que sí lo está”, dijo Mick Mulvaney, jefe interino de despacho de la Casa Blanca, “Él no desea cerrar el gobierno, que eso quede bien claro. No quiere declarar una emergencia nacional”.

Pero Mulvaney dijo que “a fin de cuentas, el compromiso del presidente es defender a la nación y lo hará con o sin el Congreso”.