Internacional

Y llegó el 'Día Cero”

Por Pelayo Terry CuervoFotos del autor(Exclusivo para Por Esto!)

LA HABANA, Cuba.- Varias tiendas de La Habana amanecieron este lunes más concurridas que de costumbre, al hacerse efectivo desde esta jornada la venta de un grupo de artículos electrodomésticos y de piezas y motos eléctricas en los establecimientos escogidos para la venta en moneda libremente convertible.

Este audaz paso del gobierno cubano, anunciado a inicios de este mes, se hizo realidad para quienes, teniendo moneda dura, no podían gastarla en el país, ante la ausencia de productos de alta demanda pero ausentes en los mercados de venta minorista.

La medida ha recibido desde su anuncio tanto elogios como cuestionamientos, aunque ha tenido, al menos en este comienzo, el doble efecto esperado. Por un lado, muchas personas pueden acceder a equipos como aires acondicionados, televisores de grandes tamaños, refrigeradores, motocicletas eléctricas, lavadoras de gran formato, piezas de repuesto para vehículos automotores en tiendas cubanas, entre otros, sin tener que acudir al tortuoso camino de adquirirlos en mercados extrafronteras, con todo lo que implica realizar una importación desde cualquier país cercano, donde México ha desempeñado un papel preponderante.

Por otro lado, y a juzgar por las primeras imágenes que apreció Por Esto! en el mercado de 3ª y 70, en la zona de Miramar, al Oeste de la ciudad, las recaudaciones de moneda libremente convertible deben comenzar a incrementarse, pues solo en esa instalación más de 300 personas hacían filas desde bien temprano para acceder a la compra de algunos de los efectos en vidriera, ubicados en una pequeña área de la tienda Samsung, abierta meses atrás dentro del propio supermercado.

Una rápida mirada a las ofertas reveló que en ella las personas podrían adquirir variados efectos electrodomésticos y al parecer los abastecimientos no serían el problema inicial, pues en el propio mercado, distribuidos incluso en áreas donde se exhiben o expenden otras mercancías como comidas o útiles del hogar, estaban almacenados cantidades considerables de refrigeradores, aires acondicionados y lavadoras. Sin embargo, los precios, aun altos para el cubano medio, estaban acorde con lo anunciado por la Ministra de Finanzas del país, Meisi Bolaños, quien aseguró que como promedio estarían en el entorno a los de productos similares en mercados de Centroamérica, donde hasta este momento, muchos cubanos acuden para satisfacer sus necesidades.

Cuba irá abriendo escalonadamente, hasta llegar a 77 en toda la nación, un grupo de tiendas donde los ciudadanos podrán adquirir productos con respaldo en moneda libremente convertible, para lo cual es obligatorio la habilitación en las sucursales bancarias de una tarjeta electrónica específica, mediante la cual podrán realizarse las compras, sin que medie efectivo alguno.

Las tarjetas podrán recibir los montos ya bien desde transferencias en el extranjero o directamente en los bancos y solo se permite efectuar depósitos en dólares estadounidenses, euros, libras esterlinas, dólares canadienses, francos suizos, pesos mexicanos, coronas danesas, noruegas y suecas y yenes japoneses.

Ahora hay que esperar a que esta carrera de largo aliento tome impulso, que la sed de compra de muchos cubanos con dinero guardado o con familias fuera del país, se vaya saciando poco a poco y que la adquisición de artículos que durante mucho tiempo fueron esquivos a quienes teniendo el dinero, no podían obtenerlos en fronteras, se convierta en algo natural, y que además, el país pueda continuar recaudando divisas frescas, esas que tanto le hacen falta a la economía nacional, sometida, como nunca antes, al asedio y agresividad del actual gobierno de Estados Unidos, empeñado en hacer colapsar al archipiélago, una aspiración de más de 60 años que no han podido cumplir.