NACIONES UNIDAS/CARACAS/WASHINGTON, 30 de abril (Agencias).- El Gobierno venezolano dijo este martes en la ONU que ha derrotó un intento de golpe de Estado convocado por el líder opositor Juan Guaidó, respaldado por Estados Unidos y varios países latinoamericanos, a los que acusó de buscar sangre para justificar una intervención militar.
Estados Unidos y otros países de la región conocían de antemano los planes de sublevación militar contra el gobierno de Nicolás Maduro y conspiraron para provocar “una guerra civil” en Venezuela, denunció el martes en la ONU el embajador Samuel Moncada.
“Este nuevo intento de potencias extranjeras para promover una guerra civil, abrir las puertas a un intervencionismo y poner un gobierno títere en nuestro país fracasó”, dijo a periodistas el representante de Maduro ante las Naciones Unidas.
El diplomático insistió en que el alzamiento se limitó a un reducido grupo de opositores y militares y que fue poco más que “una operación mediática de publicidad”.
Sin embargo, recalcó, podría haber tenido consecuencias peligrosas, al tratar de sacar a gente a las calles haciéndoles creer que había un movimiento mucho mayor del real.
Moncada aseguró que toda esa operación se “desinfló” y que el país vive en total “normalidad”, más allá de la zona de Caracas en la que se concentran manifestantes opositores.
El embajador venezolano insistió en que Estados Unidos estaba al tanto de todo lo que iba a ocurrir y lo apoyó, junto a los líderes de países como Colombia, Argentina, Brasil y Chile, entre otros.
Llamado al rechazo
Por ello, hizo un llamamiento “a la comunidad internacional a rechazar este intento violento promovido por potencias extranjeras para destruir el orden constitucional de Venezuela”.
Por su parte, la vicepresidenta ejecutiva de Venezuela, Delcy Rodríguez, aseguró que han “derrotado los golpes de Estado” y lo harán “nuevamente” con el alzamiento de Guaidó, que se levantó junto a un grupo de militares.
En la madrugada del martes, el presidente del Parlamento venezolano, Juan Guaidó, anunció el lanzamiento de la “Operación Libertad”, un levantamiento cívico-militar, para conseguir “el cese definitivo de la usurpación” que considera hace Nicolás Maduro de la Presidencia.
Guaidó llamó a mantener las protestas este miércoles contra el presidente venezolano, y pidió a la Fuerza Armada “avanzar” en acciones para deponer al mandatario.
Según el alcalde del municipio Chacao, Gustavo Duque, al menos 69 personas resultaron heridas en las protestas desatadas en Caracas.
El Grupo de Lima se declaró en sesión permanente y convocó para otra reunión el 3 de mayo.
De esos heridos, 41 fueron atendidos por perdigones, 21 por traumatismo, tres por dificultades respiratorias, dos por arma de fuego, uno por un síncope y uno por herida en una mano, detalló Duque.
El ministro de la Defensa, Vladimir Padrino, anunció que “una parte” del alzamiento “ha sido derrotado” y que “casi todos” los militares y policías que se sublevaron se retiraron hacia una plaza al este de Caracas.
“Otro engaño más”
Por su parte, el considerado número dos del chavismo, Diosdado Cabello, dijo este martes que ya “están completamente derrotados los golpistas” en Venezuela, luego de que en la mañana el líder opositor, Juan Guaidó, anunciara el levantamiento de un grupo de militares contra el Gobierno de Nicolás Maduro.
“Señores opositores: otro engaño más, los engañan con fechas y con nombres, les hablaron de Operación Libertad, que cosa más sublime: la libertad, pero les ocultaron que se trataba solo de la libertad del fascista asesino Leopoldo López, qué pena”, añadió en otro mensaje.
Guaidó aseguró la madrugada de este martes que los militares dieron “de una vez el paso” para unirse a él y desconocieron a Maduro, que en enero pasado juró un nuevo mandato de 6 años que no reconocen la oposición y buena parte de la comunidad internacional.
El secretario general de la ONU, António Guterres, llamó este martes a todas las partes de la crisis en Venezuela a “evitar cualquier violencia” y a dar pasos “inmediatos” para devolver la calma al país.
“Total lealtad”
El presidente Nicolás Maduro aseguró que cuenta con la “total lealtad” de los jefes militares del país en vista del levantamiento popular convocado por Guaidó.
Maduro llamó a la “máxima movilización popular para asegurar la victoria de la paz”.
En paralelo, el canciller Jorge Arreaza dijo a The Associated Press que Maduro “está en su puesto de comando” y que más tarde estará con seguidores en el palacio presidencial. “No hay ninguna preocupación”, sostuvo.
El secretario estadounidense de Estado, Mike Pompeo, aseguró este martes que Maduro estaba listo para abandonar el país “esta mañana”, pero recibió indicaciones de Rusia de que debía permanecer ahí.
“Él tenía un avión en la pista, estaba listo para irse esta mañana, según entendemos, y los rusos indicaron que debería quedarse”, declaró Pompeo a la cadena de televisión estadounidense CNN.
Veinticinco militares venezolanos de rango bajo pidieron asilo este martes en la embajada de Brasil en Caracas durante la acción en apoyo a Guaidó, informó el portavoz de la presidencia brasileña Otávo Rêgo Barros.
Amenazas e injerencia
El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, dijo el martes que Estados Unidos impondría sanciones y un embargo total a Cuba si la isla continúa su apoyo militar al gobierno del presidente venezolano, Nicolás Maduro.
“Si las tropas y milicias cubanas no CESAN de inmediato las operaciones militares y de otro tipo con el propósito de causar muerte y destrucción de la Constitución de Venezuela, se colocará a la isla de Cuba un embargo total, junto con las sanciones de más alto nivel”, publicó Trump en Twitter.
“¡Ojalá todos los soldados cubanos regresen a su isla de manera rápida y pacífica!”, agregó.
Trump expresó respaldo “al pueblo de Venezuela y su libertad”, al comentar el levantamiento de Guaidó frente al Gobierno de Maduro.
De su lado, el asesor de Seguridad Nacional de la Casa Blanca, John Bolton, instó a las Fuerzas Armadas de Venezuela a defender “las instituciones legítimas contra la usurpación de la democracia”, después de que el líder opositor Juan Guaidó anunciara que “la familia militar” dio el paso de unírsele.
“Figuras como el ministro de Defensa Vladimir Padrino, el presidente del Tribunal Supremo de Justicia (TSJ) de Venezuela, Maikel Moreno, y el comandante de la Guardia de Honor Presidencial, (Iván) Rafael Hernández Dala, todos ellos están de acuerdo en que Maduro debe irse”, dijo Bolton a los periodistas en la Casa Blanca.
El vicepresidente de EE.UU., Mike Pence, envió por su parte un mensaje en Twitter dirigido a Guaidó, a la “Asamblea Nacional (Parlamento) y todo el pueblo de Venezuela amante de la libertad que está tomando hoy las calles en la #operacionlibertad”.
El enviado especial de EE.UU. para Venezuela, Elliott Abrams, precisó en otro encuentro con reporteros que esos tres altos cargos del chavismo han mantenido “negociaciones” durante “el último mes o dos” con figuras de la oposición sobre cómo “volver a la Constitución”.
Abrams aseguró que su Gobierno no formó parte de las negociaciones entre miembros de la oposición venezolana y el ministro de Defensa Vladímir Padrino para derrocar al presidente Nicolás Maduro.
Estados Unidos fue el primer país del mundo en reconocer como presidente a Guaidó, quien el 23 de enero invocó unos artículos de la Constitución para reclamar que como presidente de la Asamblea Nacional podía declararse jefe de Estado ante lo que considera la “usurpación” de Maduro.
Valoración de Rusia
En Moscú, el presidente ruso Vladimir Putin discutió la crisis en Venezuela con su cuerpo de seguridad. Rusia es un aliado clave de Maduro y uno de los principales proveedores de armas de su gobierno.
Las agencias de noticias rusas reportaron que el portavoz del Kremlin, Dmitry Peskov, dijo que Putin planteó la cuestión durante una reunión programada con su Consejo de Seguridad.
La reunión “prestó una atención significativa a los reportes noticiosos sobre un intento de golpe de Estado en ese país”, dijo Peskov, pero no proporcionó más detalles.
La embajada rusa en Venezuela aseguró hoy que los militares venezolanos continúan del lado del Gobierno de Maduro después de Guaidó llamara a un levantamiento cívico-militar.
“Los militares siguen al lado del Gobierno legítimo. Ninguna instalación militar ha sido tomada” por la oposición, dijo un portavoz de la misión diplomática a la agencia rusa Interfax.
“La situación en general es tranquila. No tenemos información de que alguno de nuestros ciudadanos haya sido herido”, aseguró el diplomático ruso.
Divisiones en la UE
Las naciones europeas hicieron el martes un exhorto a la calma en Venezuela y pidieron convocar a elecciones como una manera de resolver la crisis política que aqueja al país sudamericano.
Sin embargo, no hubo una postura unificada sobre si apoyar o condenar las acciones de la oposición para destituir al presidente Nicolás Maduro.
Oficialmente, la Unión Europea reiteró su posición de pedir una “solución política y pacífica a través de elecciones libres y justas”, dijo Maja Kocijancic, portavoz de la Comisión Europea, en rueda de prensa.
El presidente del Parlamento Europeo, Antonio Tajani, surgió como la voz más fuerte del bloque común en apoyo a la oposición. En un tuit, Tajani dijo que los eventos eran “un momento histórico para el regreso a la democracia y la libertad en Venezuela”, y señaló que la liberación del activista Leopoldo López de arresto domiciliario era una “gran noticia”.
“¡Vamos Venezuela libre!”, escribió Tajani, un importante líder conservador.
Todos excepto cuatro miembros de la UE respaldaron la moción inicial de febrero de apoyar al líder opositor venezolano Juan Guaidó cuando se proclamó presidente encargado del país.
Esos cuatro fueron: Italia, Grecia, Chipre y Eslovaquia.
Italia se ha declarado neutral sobre la situación en Venezuela, reflejando las divisiones que hay en el gobierno de coalición del país entre la Liga, partido de derecha y que favorece a Guaidó, y el Movimiento 5 Estrellas, que se ha opuesto a respaldarlo.
El gobierno griego de izquierda tampoco ha cedido a la presión para respaldar a Guaidó y no ha manifestado su apoyo a Maduro, como lo ha hecho en el pasado. En su lugar, ha dicho que unas elecciones son la única forma de acabar con la crisis.
Chipre y Eslovaquia han adoptado una postura similar.
Eslovaquia no reconoce a Guaidó como presidente legítimo, manifestó Boris Gandel, portavoz del Ministerio de Asuntos Exteriores. Sin embargo, añadió que ningún representante eslovaco asistió a la investidura de Maduro y eso mostró que el país no reconoce los resultados de los comicios presidenciales del año pasado.
España, que ha recibido el crédito por fijar la postura de la UE en cuanto a Venezuela, ha caminado por una línea muy delgada hasta ahora.
Aunque el gobierno español de centroizquierda fue el primero entre sus pares europeos en respaldar a Guaidó y reconocer a uno de sus socios como el “enviado especial del presidente legítimo” en Madrid, no utilizó el término de “embajador”.