Pelayo Terry Cuervo
De los diversos canales de comunicación actuales, nadie duda que los asociados a las redes sociales ganan por día más adeptos, sobre todo los más jóvenes, que, celular en mano, “mueven” el mundo conectados a Internet.
Cuba, acusada reiteradamente de todo lo que nadie pueda imaginar, sobre todo en el tema de la libertad de expresión, ha sido víctima en las últimas horas de una estrategia de censura, al ser cerradas, “sin previo aviso” un grupo importante de cuentas de periodistas y medios de prensa del archipiélago en la red social Twitter.
¿Casualidad? ¿Errores técnicos? Nada eso. Tres horas antes de que este miércoles el presidente cubano Miguel Díaz-Canel compareciera en el programa televisivo Mesa Redonda, junto al Consejo de Ministros, para explicar al país la compleja situación energética coyuntural por la que atraviesa la nación, Twitter decide bloquear decenas de cuentas de profesionales y sitios digitales cubanos.
Apenas iniciada la transmisión en vivo del programa a las 6:30 pm -hora local- muchos de los afectados iniciaron las denuncias, a través de Facebook, Whatsapp y otros canales sociales, de que sus cuentas en Twitter habían sido suspendidas.
“Tu cuenta está suspendida y no puedes realizar esta acción” es el mensaje que aparece cuando los afectados tratan de abrir su cuenta para comentar, retuitear o dar me gusta.
Entre los medios bloqueados “por violar las reglas de Twitter”, según reza en la propia red social, se encuentran sitios con altas visitas en Internet como Cubadebate con casi 300,000 seguidores en esa plataforma y el diario Granma con cerca de 167,000 seguidores, además de la cuenta del propio espacio televisivo, Radio Rebelde, Dominio Cuba, Cubaperiodistas y el Canal Caribe, entre otros usuarios, que incluyen a periodistas en activo, como quien escribe este trabajo, cuya cuenta aún se mantiene bloqueada.
La cancillería local denunció que durante la intervención del presidente en la Mesa Redonda, “Twitter suspendió las cuentas de los principales medios y operadores de información de Cuba. En una evidente operación concertada se trató de limitar los pronunciamientos de los revolucionarios en favor de la verdad”, señaló Cubaminrex.
Por otro lado, el sitio web Cubaperiodistas, de la Unión de Periodistas de Cuba, publicó una Declaración de la organización gremial, en la cual se denuncia esta nueva maniobra, que “parece una operación concertada de denuncias falsas por uso abusivo y violación de políticas de la plataforma. Sorprende el sesgo político, la selectividad de los usuarios afectados y la oportunidad (oportunismo)”.
No es la primera vez que usuarios cubanos de Twitter reportan problemas para ingresar a sus cuentas y reciben mensajes de que éstas han sido bloqueadas y deben seguir el procedimiento para recuperarlas. Lo nuevo es la masividad de este acto de guerra cibernética, obviamente planificado, que busca limitar la libertad de expresión de instituciones y ciudadanos cubanos, y silenciar a los líderes de la Revolución, señala la Declaración de la UPEC.
De acuerdo con trascendidos, el Grupo de Tareas de Internet para Cuba, del Departamento de Estado norteamericano, emitió hace pocos meses recomendaciones para utilizar la red como autopista de subversión contra el archipiélago y propuso entregar más fondos para abrir sitios digitales, generar “contenidos atractivos” en la red, dotar de becas y financiar a una cibermilitancia entrenada en el acoso, la mentira y el sicariato político, que no suele ser afectada por este tipo de acciones de Twitter.
Y es curioso, pues hasta donde se sabe, ninguna de las cuentas suspendidas ha violado las políticas establecidas por esta red social.
Con esta nueva estrategia, la plataforma viola lo mismo que intentan criticar a Cuba y multiplica la censura ante un acontecimiento noticioso de suma importancia. Es como si estuvieran desesperados por esconder la realidad de lo que ocurre en el archipiélago, esa que al final encuentra espacio en la opinión pública, no obstante que Twitter y otros desde el Norte, intenten silenciar lo que ocurre en estos lares. Tendrá que transitar por un camino más largo, sin embargo, la verdad no podrá ser escamoteada.