PARIS, Francia, 15 de marzo (AFP).- Los franceses dieron la espalda a las urnas este domingo, en la primera vuelta de unos comicios municipales que se celebraron en un contexto inédito y en un país semiparalizado por la epidemia del coronavirus.
Entre los cerca de 48 millones de electores llamados a elegir a sus alcaldes, sólo la mitad acudieron a las urnas, según las primeras estimaciones.
Según un sondeo, el 39% de las personas que renunciaron a votar lo hicieron por temor al coronavirus. Este nuevo récord es “absolutamente increíble”, expresó Brice Teinturier, director de la encuestadora Ipsos.
La abstención es casi 20 puntos mayor que la registrada en los precedentes comicios municipales de 2014. Esta cifra récord plantea dudas sobre si se mantendrá la segunda vuelta, prevista en una semana, sobre todo con una epidemia que se expande a una velocidad imprevisible.
Anne Hidalgo logra el primer
puesto en París
Pese al cierre de sus escuelas, restaurantes, museos, cafés y comercios no indispensables, Francia decidió, contra todo pronóstico, mantener sus elecciones de este domingo.
Debemos “asegurar la continuidad de la vida democrática y de las instituciones”, urgió el presidente, Emmanuel Macron, que aseguró haber tomado esta decisión tras haber consultado a científicos, que estimaron que “no hay nada que impida a los franceses, incluso a los más vulnerables, ir a las urnas”.
En la entrada de los 35.000 centros electorales del país se puso a disposición de los votantes gel antiséptico para que se pudieran desinfectar las manos antes de depositar sus votos y se colocó cinta adhesiva en el suelo para que mantuvieran entre ellos una distancia de seguridad de al menos un metro.
“¡Si respetamos las consignas y nos lavamos las manos antes y después, no hay por qué tener miedo!”, estimó Vanessa Bouissou, de 40 años, que desafío la psicosis general y fue a votar en un centro electoral del sur de París.
Frente a un centro electoral en Escames, una pequeña localidad rural al norte de París particularmente afectada al inicio de la infección, un paquete de guantes quirúrgicos y una botella de gel antiséptico daban la bienvenida a los electores.