Internacional

Sin empleo por la pandemia en EE. UU.

NUEVA YORK, Estados Unidos, 19 de abril (AFP).- Sin empleo y sin dinero por la pandemia de coronavirus, millones de personas hacen fila durante horas en Estados Unidos para poder recibir comida gratis.

Los bancos de alimentos, que ya atendían a una población vulnerable, multiplican la distribución, pero temen no poder hacer frente a la creciente demanda.

Las mismas escenas se reproducen por todo el país, de Nueva Orleans a

Detroit, pasando por Nueva York, donde el gobierno municipal reparte desayuno, almuerzo y cena gratuitos en varios puntos de la ciudad.

Son imágenes de una población desesperada, que en general ha perdido su empleo y por tanto sus ingresos, a la espera de la llegada de un cheque del gobierno federal, que aprobó a fines de marzo un gran plan de apoyo a la economía.

Pero para algunos, como millones de inmigrantes sin papeles, en su mayoría de origen latinoamericano, no habrá cheque, advirtió el gobierno de Donald Trump.

“Estoy sin nada”

“Ya tengo ahorita dos meses que no trabajo porque casi fui uno de los primeros que el virus agarró, y pues no tengo trabajo y pues dinero tampoco”, dijo a la AFP Domingo Jiménez, un inmigrante que hacía una fila de más tres cuadras el viernes para recibir comida del gobierno municipal en Corona,

Queens, uno de los barrios más afectados por la COVID-19 en Nueva York.

“Vengo aquí que me den un poco de alimento, lo que sea, porque prácticamente estoy sin nada”, añadió.

El martes, más de 1,000 vehículos esperaban en fila en una distribución organizada por el banco de alimentos de Pittsburgh, en Pensilvania, cuya demanda aumentó 38% en marzo.

En ocho operaciones excepcionales como esta, unas 227 toneladas de comida fueron repartidos, explicó Brian Gulish, su vicepresidente.

“Muchas personas utilizan nuestros servicios por primera vez”, señaló. “Es por eso que las filas son tan largas. No conocen nuestra red” de más de 350 puntos de recolección en el suroeste de Pensilvania, dijo.

El 9 de abril, en San Antonio, Texas, unos 10,000 vehículos hicieron fila en un banco de alimentos, algunos desde la noche hasta la mañana siguiente.

“Hace meses que no tenemos más trabajo”, cuenta Alana, una latina que prefiere no dar su apellido en la ciudad de Chelsea, en la periferia de Boston, la más afectada por la pandemia en el estado de Massachusetts.

“Ayer vi una mujer con un bebé de 15 días y otros dos niños, su marido está desempleado, y no tiene más comida en su casa. Le di lo que tenía”, contó a la AFP durante una distribución de alimentos realizada por soldados de la Guardia Nacional.