Internacional

Bolsonaro encara su peor crisis política

SAO PAULO, Brasil, 25 de abril (EFE).- En el momento más tenso e incierto de sus 16 meses en la Presidencia de Brasil, Jair Bolsonaro agravó este sábado los ataques contra el popular exjuez Sergio Moro, quien dimitió como ministro de Justicia denunciando “interferencias políticas”.

La crisis abierta en plena pandemia, que en Brasil ha dejado más de 3,000 víctimas mortales, ha intensificado además el debate sobre la capacidad del presidente para seguir en su cargo.

Al caso de Moro, quien renunció este viernes alegando “interferencias políticas” de Bolsonaro, se une el del ministro de Salud, Luiz Henrique Mandetta, cesado la semana pasada por oponerse a relajar las medidas de distanciamiento para luchar contra el coronavirus.

Bolsonaro ha sido uno de los pocos mandatarios en el mundo en subestimar el alcance del virus, al que tildó de “gripecita”, y ha abogado por reabrir el comercio lo antes posible, en contra de las recomendaciones sanitarias locales y mundiales.

A pesar de los numerosos pedidos de apertura de juicio político que pueden desembocar en la destitución de Bolsonaro, Rodrigo Maia, el presidente de la Cámara de Diputados y encargado de tramitar la solicitud, todavía no se ha pronunciado públicamente.

El grueso de los partidos de centro-derecha con representación parlamentaria, claves para que salga adelante el proceso, tampoco han dado, de momento, señales sobre la idoneidad de abrir un juicio político.

El último sucedió en 2016 y desembocó en la destitución de la entonces presidenta de izquierdas, Dilma Rousseff, por presuntas irregularidades fiscales en el manejo del presupuesto estatal.

Rifirrafe Bolsonaro-Moro

Bolsonaro usó las redes sociales para volver a hostilizar a Moro, considerado por muchos un héroe nacional por dirigir el caso “Lava Jato”, la megaoperación anticorrupción que encarceló a decenas de empresarios y políticos, ente ellos el expresidente Luiz Inácio Lula de Silva.

El jefe de Estado de Brasil, que se mueve con soltura en el terreno del ring político, publicó una foto junto con su exministro y un texto en el que sugiere ingratitud por parte de Moro.

Aseguró que siempre estuvo al lado del antiguo magistrado incluso cuando, a mediados de 2019, arreciaban críticas por su supuesta imparcialidad en el caso que llevó a la cárcel a Lula y algunos partidos políticos intentaban acabar con su reputación.

Moro respondió a Bolsonaro y afirmó que él también apoyó al presidente cuando “injustamente” le atacaron.

“Sobre la reclamación en la red social del señor presidente sobre la supuesta ingratitud: también apoyé al PR (presidente) cuando él fue injustamente atacado. Pero preservar la PF (Policía Federal) de interferencia política es una cuestión institucional, de Estado de derecho, y no de relación personas”, replicó Moro en Twitter.

En su agria despedida el viernes, el antiguo juez justificó su marcha por el cese de Mauricio Valeixo como jefe de la Policía Federal sin un motivo aparente y denunció “interferencias políticas” de Bolsonaro en el nombramiento de un eventual sucesor.

Para muchos analistas, la clave de la destitución de Valeixo está en procesos que salpican directamente al entorno familiar del mandatario, concretamente a dos de sus hijos, el senador Flavio y el concejal de Rio de Janeiro Carlos.

Las insinuaciones de Moro, negadas vehementemente por Bolsonaro, llevaron a la Fiscalía brasileña a pedir al Tribunal Supremo determinar si hay motivos para abrir una investigación para saber si el presidente cometió un eventual delito de falsedad ideológica, coacción, prevaricación u obstrucción a la Justicia, entre otros.

El exmagistrado, quien denunció además suplantación de su firma en el decreto de cese de Valeixo, mostró en el telediario del canal Globo algunos mensajes de móviles que supuestamente respaldarían su versión.

Lula ataca a los dos

El expresidente Luiz Inácio Lula da Silva, quien fue conducido a la cárcel por el juez y ahora exministro Sergio Moro, afirmó que tanto el presidente Jair Bolsonaro como el extitular de Justicia son “bandidos” en medio de una disputa.

“No puede haber inversión de la historia. Bolsonaro es hijo de Moro y no Moro cría de Bolsonaro. En toda esa disputa, los dos son bandidos, pero Bolsonaro es la cría y no al contrario”, resaltó Lula en sus redes sociales.