Internacional

El muro ha detenido a inmigrantes y al virus

Severa advertencia a manifestantes de Washington

YUMA, Arizona, EE.UU., 23 de junio (AP/AFP).- El presidente Donald Trump visitó el martes la frontera con México para celebrar la construcción de más de 320 kilómetros de muro, con la esperanza de que les recuerde a los votantes de su progreso en torno a una de sus promesas de la campaña de 2016.

Trump le atribuyó al muro no sólo haber frenado la inmigración ilegal, sino también al coronavirus, diciendo “frenó el COVID, lo frenó todo”.

Pero su visita se llevó a cabo en momentos en que funcionarios de salud pública en Washington testificaban sobre la amenaza actual del coronavirus, y señalando a Arizona en los que se registra un incremento de casos.

Trump estaba tratando de recuperar impulso para su campaña tras el evento del fin de semana en Tulsa, Oklahoma, que se suponía fuera una señal de la reapertura del país y un despliegue de fuerza política.

Pero en lugar de ello, tuvo miles de asientos vacíos y generó dudas sobre el liderazgo de la campaña del presidente y sus aspiraciones de reelección.

La baja asistencia centró aún más la atención en la visita de Trump a Arizona, un estado sin clara preferencia política y un creciente foco de infección del coronavirus.

Al visitar la frontera, Trump trató de cambiar el tema a un asunto que él piensa le ayudará a revitalizar a sus seguidores en noviembre.

“Nuestra frontera nunca ha estado más segura “, declaró Trump al reunirse con el gobernador republicano Doug Ducey y funcionarios de la Patrulla Fronteriza.

En todo el viaje, el tema del coronavirus tendría una sombra sobre el gobernante. La alcaldesa de Phoenix ha dicho claramente que no cree que sea buena idea que tantas personas se congreguen allí y ha exhortado al mandatario a usar mascarilla.

Trump se ha negado a usar la mascarilla en público, convirtiendo el tema en un asunto cultural entre republicanos y demócratas. Las encuestas indican que los republicanos usan mucho menos las mascarillas comparado con los demócratas, pese a las advertencias de expertos de que ello reduce drásticamente la posibilidad de contraer el virus.

Desde finales de mayo, Arizona ha surgido como uno de los centros de contagio más graves del país.

Advertencia a manifestantes

El presidente de Estados Unidos advirtió el martes que impedirá con rigor la creación de una “zona autónoma” libre de policías en Washington como la que se creó en Seattle.

Un día después de que la policía dispersara a manifestantes que intentaban derribar la estatua de un expresidente cerca de la Casa Blanca, Trump también amenazó con severas penas de prisión a los “anarquistas” que dañen monumentos nacionales.

“Autoricé al gobierno federal a arrestar con hasta 10 años de prisión a toda persona que vandalice o destruya cualquier monumento, estatua o cualquier otra propiedad federal de ese tipo en Estados Unidos”, dijo en Twitter.

“Nunca habrá una ‘Zona Autónoma’ en Washington DC mientras yo sea presidente. Si lo intentan, ¡se enfrentarán con una gran fuerza!”, añadió.

Trump aludió al distrito libre de policías creado hace dos semanas por manifestantes en Seattle, en el estado de Washington, y que desató furia entre conservadores.

El sábado la policía fue impedida de acceder a esa área de seis manzanas de Seattle denominada “Capitol Hill Autonomous Zone” luego de la muerte a balazos de una persona y el lunes el alcalde de esa ciudad anunció que planea retomar el control de ese territorio.