Al menos 45 personas murieron y otras más resultaron heridas cuando un avión militar filipino se estrelló e incendió tras aterrizar en una pista en el sur del país asiático. En la aeronave tipo Hércules C-130 se encontraban a bordo 92 personas, en su mayoría tropas de Cagayán de Oro, una de las ciudades más importantes de la isla sureña de Mindanao.
El secretario de Defensa de Filipinas, Delfín Lorenzana, señaló en un comunicado que cinco personas continúan desaparecidas. Algunos soldados fueron vistos mientras saltaban del avión antes de que se impactara contra el suelo e incendiara, señaló el general William Gonzales, comandante del grupo de tareas conjuntas de Sulu.
El avión se accidentó cerca de una cantera, en una zona poco poblada, dijo la primera teniente Jerrica Angela Manongdo. Los informes iniciales indican que el aparato se rompió en dos.