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El presidente ucraniano, Volodymyr Zelensky, celebró la llegada de aviones F-16 de Estados Unidos, como un "nuevo capítulo" para la defensa aérea de Ucrania

El presidente ucraniano, Volodymyr Zelensky, anunció con entusiasmo la llegada de los aviones de combate F-16 de fabricación estadounidense, describiendo este momento como un "nuevo capítulo" para las fuerzas armadas de Ucrania. Estos aviones serán utilizados por primera vez contra Rusia, marcando una mejora significativa en el sistema de defensa aérea del país.

En una ceremonia realizada el domingo por la mañana, Zelensky expresó su agradecimiento a Estados Unidos, Dinamarca y los Países Bajos por entregar los aviones de guerra tan necesarios. "F-16 en Ucrania: lo hemos logrado", declaró Zelensky, destacando el esfuerzo conjunto de los aliados de la OTAN.

Un refuerzo crucial para la defensa aérea

Los F-16 representan un avance significativo sobre los aviones de la era soviética que Ucrania ha utilizado en el pasado. Estos aviones están equipados con un cañón de 20 mm y son más capaces de lanzar bombas, cohetes y misiles. Zelensky destacó que los aviones actuales de Ucrania están muy anticuados y son insuficientes para enfrentar las amenazas modernas.

Aunque Zelensky no especificó el número exacto de F-16 recibidos, se sabe que los aliados de la OTAN se comprometieron a entregar alrededor de 80 aviones después de que el presidente estadounidense Joe Biden aprobó la participación de Estados Unidos en mayo. Estos aviones serán pilotados por el primer grupo de pilotos ucranianos que se graduaron del Centro Europeo de Entrenamiento F-16 en los Países Bajos.

Desafíos y expectativas

A pesar de la emoción por la llegada de los F-16, la efectividad de esta medida aún está por verse. Los pilotos ucranianos han recibido solo un año de entrenamiento, comparado con los cuatro años de preparación que normalmente tienen los pilotos en Dinamarca. Esta diferencia en el tiempo de formación plantea dudas sobre el rendimiento inicial de los pilotos ucranianos en combate.

Además, aunque la llegada de los F-16 aumentará las capacidades militares de Kiev, algunos líderes de la OTAN temen que estos aviones no sean suficientes para cambiar el rumbo de la guerra. "Es un añadido importante", afirmó el ministro noruego de Asuntos Exteriores, Espen Barth Eide. "No cambia por sí solo la guerra".

Apoyo internacional y futuro

Otros países de la OTAN, incluido Estados Unidos, también han ofrecido permitir que más pilotos ucranianos se entrenen utilizando F-16 en sus territorios, según informa el Wall Street Journal. Esta cooperación internacional subraya el apoyo continuo de la OTAN a Ucrania en su conflicto con Rusia.

La llegada de los F-16 marca un hito importante en la capacidad defensiva de Ucrania, pero el camino hacia la estabilización y la paz en la región sigue siendo incierto.

IO