Internacional

Kamala Harris y Donald Trump se encontraron en el homenaje del 11-S en Nueva York, tras protagonizar un debate crucial en su camino a las elecciones presidenciales de 2024

Este miércoles 11 de septiembre de 2024, la vicepresidenta y candidata demócrata Kamala Harris y el expresidente y aspirante republicano Donald Trump se volvieron a encontrar, esta vez en un acto conmemorativo en Nueva York. El evento, que marcó el 23 aniversario de los atentados del 11-S, sirvió como escenario para el reencuentro de ambos, horas después de haber participado en un tenso debate televisado.

Ambos candidatos presidenciales coincidieron en la "zona cero" del World Trade Center, lugar emblemático donde se llevaron a cabo los homenajes a las víctimas del ataque terrorista que dejó 3.000 fallecidos en 2001. Harris llegó al evento en compañía del presidente Joe Biden y el líder de la mayoría demócrata en el Senado, Chuck Schumer, mientras que Trump acudió acompañado por JD Vance, su posible candidato a vicepresidente.

Un apretón de manos tras el debate presidencial

Harris y Trump se saludaron con un apretón de manos y mantuvieron una breve conversación, en la que se mostraron cordiales. Este encuentro se produjo apenas unas horas después del primer debate entre ambos, un intercambio dialéctico que forma parte de la carrera presidencial para las elecciones de noviembre.

A pesar de las diferencias políticas, la interacción pública entre ambos fue breve y respetuosa. Sin embargo, este gesto contrastó con las críticas que Trump había lanzado hacia Harris y el gobierno demócrata poco antes, durante una entrevista en la cadena Fox News.

Críticas de Trump hacia los demócratas antes del homenaje

Previo a su asistencia al acto conmemorativo, Trump participó en el programa Fox & Friends, donde criticó la gestión de la administración demócrata, especialmente en temas relacionados con la inmigración y la seguridad fronteriza. Según el expresidente, las políticas de "apertura de fronteras" han permitido la entrada de "criminales procedentes de todo el mundo", señalando que este será uno de los ejes de su campaña electoral.

En relación con el atentado del 11-S, Trump también compartió su visión sobre aquel fatídico día, calificándolo como "horrible" y "triste", sin aportar detalles sobre sus propuestas para la seguridad nacional.

Un homenaje solemne en la zona cero

Durante el homenaje, Harris mostró un comportamiento solemne, manteniendo una expresión seria y, en algunos momentos, dirigiendo la mirada al suelo en señal de respeto. Trump, por su parte, adoptó una postura erguida mientras participaba en el acto. Ambos políticos formaron parte de una fotografía oficial junto al presidente Biden y otras figuras políticas como Chuck Schumer y el exalcalde de Nueva York, Michael Bloomberg.

El acto en memoria de las víctimas del 11-S, un evento que se celebra cada año, incluyó la tradicional lectura de los nombres de los fallecidos, varios minutos de silencio y la colocación de banderas y rosas en los fosos donde se encontraban las Torres Gemelas. Estos homenajes también se replicaron en otros lugares clave, como el Pentágono y Shanksville, Pensilvania, sitios donde se estrellaron los aviones durante los atentados.

Un momento de reflexión en medio de la contienda electoral

El encuentro entre Harris y Trump en el homenaje del 11-S pone en relieve la importancia simbólica y política de este tipo de actos en medio de una intensa campaña electoral. Ambos candidatos buscan captar el voto de los ciudadanos, y la asistencia a eventos como este permite mostrar una faceta más cercana y respetuosa en momentos clave de la historia de Estados Unidos.

A medida que se acercan las elecciones de noviembre, los encuentros entre Harris y Trump se tornarán cada vez más frecuentes, tanto en debates como en eventos públicos. Cada una de estas interacciones será cuidadosamente analizada por los votantes, especialmente aquellos que aún no han decidido a quién apoyar.

En este contexto, la postura de ambos candidatos frente a temas como la seguridad nacional, la inmigración y la unidad del país serán determinantes para definir el rumbo de las elecciones presidenciales.

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