El Servicio Postal de Estados Unidos (USPS, por sus siglas en inglés) anunció la suspensión temporal de la recepción de paquetes provenientes de China y Hong Kong, a partir del 4 de febrero y hasta nuevo aviso.
La medida no afectará el envío de cartas y sobres planos, los cuales seguirán siendo aceptados por el servicio postal estadounidense.
Sin embargo, la decisión se produce en un momento de altas tensiones comerciales entre Washington y Pekín, exacerbadas por la imposición de nuevos aranceles por parte del gobierno de Donald Trump.
Escalada comercial entre EE.UU. y China
La suspensión de los envíos desde China y Hong Kong coincide con la entrada en vigor de aranceles del 10 por ciento a las importaciones chinas, decretados por la administración de Trump.
Aunque el mandatario estadounidense optó por retrasar un mes la aplicación de tarifas contra México y Canadá, las restricciones a productos chinos se mantienen firmes.
Por su parte, el gobierno de Pekín respondió con tarifas selectivas que afectan productos estratégicos como petróleo, gas licuado, maquinaria y automóviles de gran cilindrada.
Además, China lanzó una investigación antimonopolio contra Google y anunció controles a la exportación de minerales críticos, recursos esenciales para la fabricación de productos tecnológicos y baterías.
Un conflicto comercial de larga data
Desde su primera presidencia (2017-2021), Trump ha mantenido una política comercial agresiva contra China, imponiendo gravámenes por un valor total estimado de 370 mil millones de dólares anuales.
Pekín ha respondido con aranceles equivalentes a diversos productos estadounidenses, manteniendo la disputa comercial entre ambas potencias.
Hasta el momento, USPS no ha proporcionado detalles adicionales sobre la suspensión de paquetes internacionales desde China y Hong Kong, ni ha establecido una fecha estimada para el restablecimiento del servicio.
IO