SDP Noticias.- Con el objetivo de establecer un “puente humanitario” de apoyo a los migrantes centroamericanos, el Jefe de gobierno, José Ramón Amieva; la jefa de gobierno electa, Claudia Shienbaum y la ombudsperson local, Nashieli Ramírez Hernández, firmaron un convenio para atender a los extranjeros que vienen en la caravana.
En este marco, dieron el banderazo de la salida a más de 300 brigadistas que acompañarán el éxodo centroamericano desde Oaxaca hasta la Ciudad de México, así como 47 unidades móviles que ofrecerán atención de salud y alimentacióna los migrantes hondureños.
La presidenta de la Comisión de Derechos Humanos capitalina, Ramírez Hernández sostuvo que se trata una situación sin precedentes, y la capital del país y México deben ser solidarios y atender lo que calificó como una crisis humanitaria.
El éxodo, subrayó la ombudsperson, no se debe tratar como un asunto de seguridad nacional o interna, sino como una crisis humanitaria que debe ser atendida de manera solidaria, haciéndose énfasis en resguardar los derechos humanos, como la salud y la libertad de tránsito.
Al respecto, el Jefe de gobierno José Ramón Amieva, precisó que saldrán hacia Ixtlán, Oaxaca, para prestar atención médica y psicológica a los migrantes, y acompañarlos hasta la Ciudad de México, donde se está acordando el lugar para atender a más de cinco mil personas.
Una vez que lleguen a la urbe, subrayó el mandatario, se tiene capacidad de ofrecer mil 500 atenciones diarias; además, se instalará un centro de acopio en el Zócalo para recibir la ayuda de los capitalinos, y convocó a las 16 alcaldías a instalar centros de acopio.
Por su parte Claudia Shienbaum Pardo, apuntó que por ley la capital del país está obligada a prestar la ayuda humanitaria, pues de acuerdo con el Artículo 11 de la Constitución local, y se deben respetar los derechos humanos de las personas independiente de su estatus migratorio.
Con información de Notimex