CIUDAD DE MEXICO, 24 de diciembre (Gobierno de México).- El presidente Andrés Manuel López Obrador deseó una feliz Navidad al pueblo de México e hizo un llamado a la solidaridad, la reconciliación y la fraternidad con los sectores vulnerables.
“Muchas felicidades a todas las familias, a todos los compatriotas.
Que este día por la noche sea un día de amor, de encuentro, de reconciliación, que sea algo bello, de alegría, de felicidad. A todos les deseamos eso, que sea también un día para la solidaridad, la fraternidad con los que sufren, con los enfermos, con los familiares que están padeciendo por la pérdida de sus familiares cercanos, los desaparecidos, los humildes, los pobres, los que están en situación de abandono: niñas, niños, mujeres, huérfanos. A todas, a todos, nuestra solidaridad, nuestro abrazo fraterno y que se pase bien la noche de hoy”, expresó.
Aseguró que continuará trabajando para procurar la felicidad a la población, al tiempo que refrendó la agenda del sexenio, la cual consiste en acabar con la corrupción, instaurar la austeridad republicana, lograr el bienestar del pueblo, impulsar la producción y el empleo, así como garantizar la paz y la tranquilidad.
“Esa es la función principal del gobierno. A veces no es posible, duele mucho cuando hay desgracias, pérdida de vidas, tristeza, pero no dejar de luchar por la felicidad de todos los mexicanos”, apuntó.
Reiteró que si todos los ciudadanos cumplen con sus contribuciones a la Hacienda pública y el gobierno maneja con responsabilidad el presupuesto, “vamos a tener una sociedad mejor”.
Uno de los fracasos del modelo neoliberal o lo que llevó a fracaso del modelo neoliberal, entre otras cosas, era el que se imponía la misma política en todos lados, las llamadas reformas estructurales: Reforma Fiscal, Reforma Educativa, Reforma Energética, Reforma Laboral, para todo el mundo cuando cada país tiene sus propias características, su idiosincrasia, sus problemas y era la misma receta para todos, y no sólo en el caso de América Latina, sino también para Europa, para Asia, para África. Eso no puede seguir predominando, cada país tiene que tener su plan de desarrollo.
Nosotros llegamos al extremo que en 30 años no se elaboró un plan de desarrollo propio, se gobernó con recetas enviadas desde el extranjero, las llamadas reformas estructurales, que no eran sólo para México, sino para todo el mundo: Reforma Fiscal, Reforma Energética, la misma política a tabla rasa. Entonces, yo creo que una de las cosas que se tienen que revisar es eso, que cada país resuelva de acuerdo a sus problemas, a sus necesidades y defina su política.
Por ejemplo, en el caso de nosotros, Reforma Energética, Reforma Fiscal, Reforma Educativa, Reforma Laboral. ¿Por qué esa agenda?, ¿por qué no en la agenda nacional primero desterrar la corrupción?
¿Cuál es el principal problema de México o era?
Ese, debió estar en el primer lugar de la agenda. Y ya dijimos aquí hace unos días que ni siquiera se mencionaba la palabra ‘corrupción’ en el discurso oficial, no van a encontrar la palabra ‘corrupción’ en el discurso oficial en el periodo neoliberal, no hay.
Bueno, al grado que 25 años, durante 25 años no era delito grave la corrupción, y la gente ni siquiera lo sabía, habían modificado el código penal durante el gobierno de Salinas para que no se considerara delito grave la corrupción, y así estuvimos 25 años.
Y era tanta la simulación que hasta se estaba creando, se estableció el instituto anticorrupción y la fiscalía anticorrupción, cuando por ley no era delito grave.
Entonces, para nosotros en la agenda es acabar con la corrupción.
Lo segundo, austeridad republicana.
Lo tercero, bienestar para el pueblo.
Cuatro, producción y empleo.
Cinco, paz y tranquilidad.
Esa es la agenda.
Reforma Fiscal, Reforma Energética, Reforma Laboral. ¿Qué es eso? Era ajustar el marco jurídico para facilitar el saqueo.
¿Qué era lo principal?
Hacer negocios al amparo del poder público y de manera específica transferir, trasladar bienes públicos a particulares. A eso se dedicaron y para poder hacer eso necesitaban un aparato burocrático oneroso, pagarles bien a los altos funcionarios públicos. Es el maiceo que se usaba en la época de Porfirio Díaz.
Por eso los sueldos de 700 mil pesos mensuales, porque así los servidores públicos se quedaban callados, eran cómplices. ¿Quién iba a hacer una denuncia? Se podía tener el Instituto de Transparencia, el Instituto Anticorrupción, la Comisión de Derechos Humanos, la Comisión Reguladora de Energía, etcétera, etcétera, etcétera, ¿y de qué servía todo eso? Como les pagaban bien, imagínense.
Ah, el instituto electoral, el Tribunal Electoral. Ahora estaba yo viendo que nueva credencial de elector, que va a tener más seguridad, ¿cuánto cuesta eso?, ¿y los sueldos? ¿Y hubo democracia en el periodo neoliberal?, o sea, del 83 a noviembre del año pasado ¿hubo democracia?, ¿no hubo fraudes?, ¿cuánto costaron el INE y el tribunal?
Entonces, era la simulación e inclusive una nueva concepción teórica. Se hablaba mucho de las nuevas políticas públicas, maestrías, doctorados, seminarios sobre las nuevas políticas públicas, y al final pura simulación para llevar a cabo el saqueo.
Fíjense que, con José del Carmen, que pertenece al medio Es Cuánto, así vamos a terminar, es cuánto.
Por otro lado, López Obrador reconoció hoy que el cambio de sede de las secretarías de Estado a diferentes puntos de la República es un proceso que va lento, pero pronosticó que será para finales de 2020 cuando la mitad de ellas ya esté fuera de la Ciudad de México.
“Nos ha llevado tiempo, vamos muy lentos en el propósito de descentralizar el Gobierno Federal, pero se va a cumplir ese compromiso pendiente. No hemos podido avanzar, pero vamos a seguir insistiendo. Pienso que ya el año próximo, a finales, ya vamos a tener mucho avance. Podría decir que más de la mitad de las secretarías”, respondió el mandatario cuando se le preguntó por el avance de ese programa de gobierno.
En su conferencia matutina, el presidente indicó que existen algunas secretarías ya iniciaron el traslado a otros estados, pero aseguró que van muy atrasados.
“La Secretaría de Energía ya está operando en Tabasco, pero no así Pemex, que tiene que trasladarse a Ciudad del Carmen, Campeche; la Comisión Federal de Electricidad, a Tuxtla Gutiérrez; Cultura, que también está ya trabajando en Tlaxcala, no completa la Secretaría. Esto va a irse dando poco a poco, pero vamos muy atrasados. Turismo, ya hay oficinas en Chetumal, en Quintana Roo, pero nos falta”, reconoció López Obrador.