Entre abucheos para el Gobernador de Michoacán, Silvano Aureoles Conejo, el Presidente Andrés Manuel López Obrador encabezó este sábado, en Uruapan, la entrega de apoyos de los Programas para el bienestar. Ahí, entre los gritos de “¡Fuera, fuera, fuera!” dirigidos al mandatorio local, el Jefe del Ejecutivo insistió esta mañana que el Gobierno federal era un facilitador de la corrupción y ha sido difícil moverlo, pero poco a poco se está haciendo una limpia y se está aplicando un plan sencillito: “acabar con la corrupción”.
El Presidente Andrés Manuel López se refirió a la problemática magisterial en Michoacán y dijo que la intención de federalizar la educación pública en la entidad –anunciada ayer– es que no le falten recursos a la entidad. “Muchos gobernadores, con todo respeto, recibían el dinero del presupuesto y se lo gastaban en otra cosa”, por eso no tenían para pagar la nómina.
Eso de retener los sueldos, de no pagar a los trabajadores, añadió el Presidente en Uruapan, Michoacán, es hasta un pecado.
Ciudad de México, 6 de abril (SinEmbargo).- Antes de su participación y a la llegada al lugar del acto, Silvano Aureoles Conejo , Gobernador de Michoacán, fue abucheado por el público congregado en Uruapan , y se escucharon gritos de “¡Fuera, fuera, fuera!”.
Al ser llamado a darle la bienvenida a López Obrador se levantó una exclamación de rechazo. Los silbidos y abucheos acompañaron su discurso. El Gobernador de extracción perredista, destacó la importancia económica y el anuncio que ayer hiciera AMLO en Zacapú: que el Gobierno de la República ayudará a resolver el problema de la nómina de las maestras y maestros en la entidad. “Es la mejor noticia que hemos recibido en los últimos 20 años”, destacó.
Con ese anuncio, agregó Aureoles Conejo, está salvando la viabilidad del estado, pues el Gobierno federal se hará cargo de los servicios educativos. “De manera personal, reitero mi voluntad y compromiso de cooperar con su Gobierno”.
Cuando habló de unidad y de evitar confrontaciones, Silvano Aureoles fue nuevamente abucheado por el público congregado en ese acto.
También pidió apoyo para fortalecer las políticas públicas en los sectores que más lo requieren, principalmente los jóvenes, las madres solteras y los adultos mayores.
Andrés Manuel López Obrador, Presidente de México, insistió este sábado que el Gobierno federal era un facilitador de la corrupción y ha sido difícil moverlo, pero poco a poco se está haciendo una limpia y se está aplicando un plan sencillito: “acabar con la corrupción”.
“Los grandes robos, atracos y los jugosos negocios –que se oiga bien y que se oiga lejos– llevaban el visto bueno del Presidente de la República”, y eso no va a pasar más, añadió el Jefe del Ejecutivo federal.
López Obrador se refirió a algunos aumentos a las gasolinas, pero dijo que están buscando un mecanismo para regular y terminar el abuso de distribuidores para que esos combustibles, como fue su compromiso, no aumenten más allá de la inflación, que él prevé en 3 por ciento.
Vamos a avanzar sin aumentar impuestos y sin endeudar el país, porque se van a liberar muchos fondos del combate a la corrupción, afirmó.
Por ejemplo, dijo, el robo de huachicol era de 65 mil millones de pesos al año, que es una suma similar a la que Michoacán recibe de presupuesto público. Lo hacían, dijo, porque había complicidad con el Gobierno. Lo que hicimos, añadió, es no ignorarlo y atacarlo desde distintos frente. No ha sido fácil, reconoció, pero la gente ayudó, aguantó, resistió, y se pudo vencer a los huachicoleros.
Hoy, de las 800 pipas que se robaban ya nomás se roban 40, y eso todavía es mucho porque la idea es erradicarlo, dijo. Además, destacó, usaban a la gente más pobre: “fue triste y doloroso lo que pasó en Hidalgo”, porque la gente le perdió el miedo a recoger gasolina.
Por eso, añadió, estamos trabajando en el Gobierno para que nadie tenga necesidad de robar.
Si seguimos así, expuso el Presidente, vamos a ahorrar 50 mil millones de pesos en el combate al huachicol, y así vamos a hacer con todo, con las compras, y nos podemos ahorrar, “por lo bajo”, hasta 250 mil millones.
En la compra de medicinas, dijo AMLO en Uruapan, Michoacán, se gastaban 90 mil millones y cuatro empresas vendían 65 por ciento de todos los medicamentos que compraba el Gobierno federal.
También ya no hay lujos en el Gobierno, afirmó, y destacó que se venderá la flotilla de aviones y helicópteros que los funcionarios usaban para ir a jugar golf, “como si fueran una bicicleta”.
“¿Cómo vengo aquí a Uruapan?, ¿dónde ven al Estado Mayor Presidencial?”. Ya no existe, ya están en las filas del Ejército, porque al Presidente lo cuida la gente, dijo. Y también, agregó, se acabaron las fantocherías.
López Obrador recordó que el Bansefi, que hoy es un “banquito”, va a ser un “bancote” que va a tener sucursales en todas las regiones del país, y que va a competir con mejores condiciones con el resto de las instituciones bancarias del país, particularmente para abaratar el envío de las remesas de los mexicanos que laboran en el extranjero, particularmente en Estados Unidos.
Por Redacción / Sin Embargo