CIUDAD DE MEXICO, 11 de mayo (La Política Online/El Financiero).- En medio de la disputa sindical en PEMEX, el proyecto de Dos Bocas, que quedará en manos de PEMEX y la Secretaría de Energía (SENER), es ya celebrado por el grupo opositor al histórico sindicato de Carlos Romero Deschamps, Petromex, pues aseguran que existe la capacidad técnica en el país para sacar adelante el colosal proyecto.
“Estamos en contra de quienes dicen que no podemos y no tenemos mano de obra calificada”, afirmó en diálogo con LPO, Oscar Solórzano, vocero de Petromex. Explicó que el sindicato que representa cuenta con especialistas capacitados y por tanto están dispuestos a colaborar en el proyecto, confiando en que es posible lograrlo con los recursos y el tiempo requerido por López Obrador -es decir, tres años y con 8,000 millones de dólares.
“Estamos listos como Sindicato Nacional Petrolero Petromex a tomarle la palabra de ayudarlo. Pero estamos yendo más allá: Queremos estar de lado de la política energética pero no en un sentido servil como sucedía en los antiguos regímenes priistas y panistas”, dijo el vocero de este gremio.
Explicó que Petromex tiene un consejo técnico académico presidido por Cuauhtémoc Cárdenas Solorzano y como el vicepresidente Fluvio Ruiz -quien en algún momento sonó para dirigir a Petróleos Mexicanos- y cuenta con expertos como el académico del ITAM, Edgar Ocampo.
La licitación de Dos Bocas quedó desierta pues ninguna de las tres empresas interesadas pudo ajustarse a los requerimientos del Gobierno. Expertos advierten que PEMEX ni SENER cuentan con la experiencia para tal proyecto ni en gestión ni en operación, por lo que ya hablan de que habrán sobrecostos y un mayor tiempo de entrega. Suelen decir también, que la última refinería que se hizo en el país fue hace 40 años.
Solórzano refuta este argumento, recordando que a pesar de que la tecnología usada era poco avanzada, llegó a ser referencia mundial. “Si en ese momento pudimos construir con esta tecnología todavía no tan avanzada, imagínate ahora”, indicó.
Agregó además que los ingenieros de PEMEX han colaborado en otras refinerías internacionales en años recientes. Brasil pidió ayuda hace 15 años, también Venezuela buscó a nuestros técnicos para sus últimas refinerías y hasta en Arabia. “Tenemos la mejor mano de obra calificada”, aseguró.
Se les acabó el negocio
Sobre las críticas que han llovido por este proyecto dice: “La derecha está enojadísima porque ya se estaba relamiendo los bigotes Se les acabó el negocio lo vamos a construir sin ayuda de empresas privadas”.
En el mercado coinciden en que una refinería de estas características costaría el doble, es decir, 12 mil millones de dólares. El petrolero refutó: “¿Esto es con o sin moches? Porque en los sexenios pasados así era, sobrecostos por los moches. Pero sin corrupción, estoy seguro que lograremos hacerlo en menos”.
Por su parte, la secretaria general de Petromex, Yolanda Morales, dijo conferencia de prensa este sábado que “el presente pronunciamiento poco tiene que ver con apoyar a un régimen o a un grupo con intereses empresariales o políticos (...). Estamos listos a la convocatoria que hizo en días pasados el señor presidente (...), donde nos invitaba a los trabajadores petroleros a ayudarlo en la construcción de la refinería”.
No obstante, el sindicato reconoció que su decisión se basa en información pública y no en informes técnicos de la refinería que, según el gobierno, comenzará a ser edificada en junio de este año.
Edgar Ocampo, miembro del consejo académico y científico de Petromex, dijo que la construcción de la refinería responde a la demanda creciente de hidrocarburos y no descartó existan sobrecostos dentro de la obra.
“Los sobrecostos son condiciones de trabajo normales en la construcción (...). Digamos que en las condiciones óptimas del desarrollo del proyecto el presupuesto suena correcto, pero no sabemos a las condiciones externas que pudiera enfrentarse este proyecto. Si tuviéramos información técnica podríamos dar una opinión (...), tenemos la información que todo mundo cuenta”, dijo Ocampo en la conferencia de prensa.
“Dentro de las filas de Petromex hay mano de obra especializada. Hay especialistas en exploración, en refinación y en todas las áreas que se van a requerir para la construcción de esta refinería”, comentó en el evento Luis Zárate, fundador del grupo.
El líder sindical afirmó que Petromex apoya la decisión del gobierno actual, a pesar de que expertos y calificadoras han manifestado preocupación por el proyecto.
“Las calificadoras le van a otorgar mayor confianza a México porque está invirtiendo internamente”, dijo Zárate respecto al riesgo sobre una baja en la calificación de la compañía productiva del Estado.
Suman 5 mil trabajadores
Petromex, que oficializó su creación en abril pasado, ha recibido cerca de 40 mil solicitudes de afiliación, y entre 5 mil y 6 mil ya han sido formalizadas.
En total, Pemex cuenta con cerca de 125 mil trabajadores. Para buscar hacerse del contrato colectivo, Petromex debe tener al menos la mitad de empleados afiliados antes del próximo mes de agosto, cuando será la siguiente negociación del documento.
“Es nada más cuestión de tiempo para llegar a los 40 mil (trabajadores) y de ahí nos vamos ir a los 60 y tantos mil, en un año vamos a tener más del 50 por ciento”, dijo Zárate.