LA PAZ, Baja California Sur, 26 de mayo (Semanario ZETA).- “Sin duda hay alguien que está amenazando a toda la población, no solo a las autoridades, está desafiando. Todo parece indicar que hay personas que solo quieren ver arder al mundo, en algún momento estuvimos impedidos por el equipo que ya cumplió su vida útil, pero sacamos la casta”, reveló a ZETA un elemento del Heroico Cuerpo de Bomberos de La Paz, tras participar en el combate al incendio de Loma Bonita.
Mayo trajo consigo una nueva amenaza para la Capital del Estado: incendios forestales, tiraderos clandestinos, de matorrales y hasta el relleno sanitario, en cuya sofocación participaron más de cien elementos y 40 unidades, con un tiempo récord de 27 horas continuas de labor.
Ocho horas demoró atender el primer incendio forestal de 2019 y el primer siniestro provocado en mayo, en la comunidad de San Pedro, donde más de cuatro hectáreas fueron afectadas.
“El sábado se suscitó el primer incendio, dentro de lo malo, lo bueno, que solo fueron 4.2 hectáreas, una superficie relativamente pequeña y en una zona en la localidad de San Pedro, fue en las Lomas de San Pedro y la vegetación que se afectó fue más matorral, vegetación y un poco de pastizal”, apuntó José Vega Vega, titular de la Comisión Nacional Forestal (Conafor).
En lo que va de 2019 se han abatido siete conatos de incendios forestales, con superficies menores a una hectárea, en este caso por su magnitud y, de no haber sido liquidado, pudo afectar casas dentro de la localidad.
De 2013 a la fecha se han contabilizado 126 incendios forestales y, aunque en el primer año se tuvieron 31, en 2018 apenas se registraron tres.
“No sabemos exactamente cómo se inició, pero es muy probable que haya sido por alguna actividad humana”, indicó la Conafor.
Pero ese fue apenas el inicio, bastaron tres días para que de nuevo se tuvieran noticias del incendiario o incendiarios en las inmediaciones del cerro Loma Bonita, en conocido basurero clandestino de La Paz, donde por años los habitantes han arrojado desechos, causando su acumulación.
Incluso sobre la basura hay más tierra y encima basura, lo que generó que el fuego, además de estar entre la misma tierra, lo que complicó aún más las labores.
“A las diez de la noche se aplicó el protocolo de emergencia por incendio, entre llantas y basura compactada entre escombros, aquí en las faldas del cerro de la colonia Loma Bonita, han sido muchas horas de trabajo, pero seguimos finiquitando en su totalidad el incendio”, expuso Daniel González, comandante de Bomberos.
Aunque las causas son desconocidas, se cree que el incendio fue provocado por alguna persona que irresponsablemente no midió sus actos y, en primera instancia, el fuego se trabajó desde las diez de la noche hasta las dos de la madrugada.
Sin embargo, a las 2:30 se reinició debido a los fuertes vientos, lo que hizo que se propagara.
“Puedo mencionar nos ha perjudicado el factor del clima, sobre todo el viento. Llegó un momento en que estuvo a punto de controlarse en su totalidad, pero hubo unas ráfagas de viento y cambió el rumbo del mismo, esto revivió la flama y reinició el incendio”, lamentó González.
Este sitio ha ardido en llamas en otras ocasiones, en la misma situación: el escombro y tierra sobre el basurero repercuten en la temperatura y con facilidad revive el fuego, aun así, se ha trabajado en cada siniestro, pero falta quien remueva el escombro y basura, limpie y elimine el riesgo, pues aunque se sofoque una y otra vez, es fácil que vuelva a arder.
“Hemos controlado en la llama, pero sigue habiendo temperatura por debajo de estos escombros y eso no nos permite que liquidemos en su totalidad el incendio”, indicó el bombero.
En la sofocación del siniestro participaron Bomberos, Protección Civil municipal y estatal, OOMSAPAS con pipas, Servicios Públicos, Secretaría de la Defensa Nacional y la Marina. Se estima que se utilizaron más de veinte pipas de agua para su liquidación.
Días después de nuevo revivió el incendio, pero los cuerpos de seguridad y rescate actuaron de inmediato y fue controlado en tres horas.
Sin embargo, el mayor problema tuvo lugar el sábado 18 de mayo, cuando un voraz incendio surgió en las instalaciones del Relleno Sanitario de La Paz, las llamas iniciaron por la tarde y el fuego se extendió rápidamente.
Prácticamente tomó 27 horas de trabajo sofocar el fuego, las llamas alcanzaron varios metros de altura y era visible de cualquier punto de la ciudad, incluso a decenas de kilómetros se apreció la columna de humo y su dispersión por el cielo.
“Específicamente en la emergencia del relleno sanitario fueron 27 horas, de las cuales durante las primeras 10 se tuvo un control y mitigación de riesgos, se trabajó con 103 elementos de diversas instituciones, 42 unidades de diversas capacidades y especificaciones”, declaró Daniel González.
Equipo rebasado
En algún momento del siniestro, Bomberos se vieron en riesgo, pues el equipo no está en buenas condiciones, dadas las inclemencias del clima por las fuertes ráfagas de viento, el intenso calor y problemas técnicos por ruptura de manguera.
“Por las características propias que guarda un relleno sanitario, se da mucho en materia en descomposición, por ende se producen diversos tipos de gases, se maneja el gas metano por la descomposición de diversos elementos y también muchos de estos gases tienen grados de inflamabilidad, entonces pudo haber sido un espejo lupa de algún resto de vidrio o inclusive algún artefacto, como un encendedor a un dispositivo, que al momento de estar trabajando en maquinaria viene un chispazo”, se informó desde Bomberos de La Paz.
Hubo una grave afectación ambiental por la contaminación, no hubo pérdidas humanas o de patrimonio, pero el riesgo es latente, incluso hay varios tiraderos clandestinos en la mira de incendiarios, tales como San Pedro, El Centenario, Reforma Agraria y otros más.
La noche del 20 de mayo, en la comunidad de El Carrizal, de nuevo otro incendio de consideración se registró por varias horas para contenerse en una bodega.
Bomberos estuvieron trabajando por varias horas sin agua, puesto que no había otra pipa que les prestara apoyo, hasta que llegó una del Organismo Operador Municipal del Sistema de Agua Potable, Alcantarillado y Saneamiento de La Paz (OOMSAPAS) llegó horas después.
“Estamos carentes de equipo, esa es la realidad, hemos tenido incendios importantes en estos días, el personal también está cansado y, referente a las pipas, tenemos una en servicio, otra tiene más de un mes en el taller, tenemos un camión chasis en la estación central que tiene como dos o tres años parado. No sé qué esperan las autoridades”, reprochó el capitán de Bomberos en el incendio de El Carrizal.
Uno de los datos duros brindados a ZETA expone que las unidades de Bomberos cuesta alrededor de un millón de pesos en caso de ser nueva, es la misma cantidad que gasta el Cuerpo de Bomberos en refacciones para las unidades viejas al año, lo que significaría ahorrarse las refacciones, que solo duran unos meses en buen estado y es necesario su reemplazo.
La última vez que recibieron unidades seminuevas fue en la administración de Armando Martínez Vega, las unidades eran usadas y con varios años de avance, lo que ha generado gasto en refacciones, en algunos casos las unidades llevan meses sin funcionar porque son caras y difíciles de encontrar, sin embargo, una en particular lleva dos años sin funcionamiento porque las refacciones son difíciles de encontrar.
“Lamentablemente vemos que algunas unidades ya ni siquiera abren las puertas, pero ahí siguen dando lo mejor de sí, los compañeros hacen lo posible, pero ya es momento que nos volteen a ver, no solo cuando estén en una emergencia”, externó uno de los bomberos.
Los Bomberos de La Paz requieren atención inmediata, puesto que en ocasiones rezan para que no haya más incidentes, ya que se suscitan eventos en los que requiere de todo el equipo, y de registrarse un siniestro considerable, el fuego podría causar graves estragos por la falta de asistencia en el momento.
A fin de que brinden un mejor servicio y no haya más afectaciones en el personal, se requiere:
* Equipo de protección personal completo y nuevo que garantice la seguridad de los elementos, ya que el actual es usado
* Camiones nuevos, ya que siempre recurren a donaciones de equipos usados por parte de ciudades hermanas
* Tres unidades extintoras de modelo reciente para dar cobertura a emergencias de incendios de estructuras, autos y demás
* Dos unidades extintoras 6x6 para incendios forestales
* Mantenimiento preventivo y correctivo de la estación central
* Ampliar la plantilla laboral por lo menos con quince elementos
* Dos unidades de apoyo logístico pick-up 4x4.