WASHINGTON, Estados Unidos, 22 de julio (Reuters).- El gobierno del presidente Donald Trump dijo el lunes que aumentará y acelerará las deportaciones de inmigrantes que entren ilegalmente a Estados Unidos al eliminar la supervisión de los tribunales, lo que permitirá que las autoridades expulsen a las personas en días en lugar de meses o años.
La norma, que será publicada el martes en la gaceta oficial del gobierno federal, aplicará la “deportación expedita” a la mayoría de quienes entren ilegalmente a Estados Unidos, a menos que puedan demostrar que han estado viviendo en el país por al menos dos años.
Expertos legales dijeron que es una expansión dramática de un programa que ya se usa en la frontera con México, que elimina la revisión de un juez de inmigración, usualmente sin acceso a un abogado. Ambos están disponibles en los procedimientos regulares.
“El gobierno de Trump está progresando en convertir al ICE (Servicio de Inmigración y Control de Aduanas) en un ejército de ‘muéstrame tus papeles’“, dijo Vanita Gupta, presidenta de la Conferencia de Liderazgo sobre Derechos Civiles y Humanos, en una llamada telefónica con periodistas.
Es posible que la medida sea bloqueada rápidamente por tribunales, dijeron varios expertos. La Unión Estadounidense por las Libertades Civiles (ACLU, por su sigla en inglés), que ya ha demandado para detener numerosas políticas de Trump sobre inmigración, prometió presentar un recurso judicial.
El presidente Donald Trump ha tenido problemas para frenar un aumento del flujo de familias centroamericanas que llegan a través de la frontera con México, lo que ha causado hacinamiento en los centros de detención y una batalla política debido a la creciente crisis humanitaria.
El gobierno dice que aumentar las deportaciones rápidas liberará espacio de detención y reducirá la carga sobre las cortes de inmigración, que tienen más de 900.000 casos pendientes.
Expertos dicen que la norma destruye el debido proceso básico y podría crear estragos más allá de las comunidades de inmigrantes.
Cerca de un 1% de los detenidos y un 0,5% de los deportados por el ICE son ciudadanos estadounidenses, según investigaciones de Jackie Stevens, profesora de ciencias políticas en Northwestern University.
“El ICE ha estado deteniendo y deportando a ciudadanos estadounidenses durante décadas”, lo que tuvo un gran costo para los contribuyentes estadounidenses en términos de litigios y compensaciones, afirmó Stevens. “Las órdenes de deportación expedita van a hacer eso mucho peor”, agregó.