México

'Cadeneros” asesinan a un joven en Zona Rosa

Los empleados del bar Híbrido lo golpearon, según testigos; el cuerpo quedó en una jardinera

La procuraduría capitalina investiga el asesinato de un joven de 24 años, cuyo cuerpo fue encontrado dentro de una jardinera de Zona Rosa. Amigos y familiares de la víctima denunciaron a las autoridades policiacas que los responsables fueron unos “cadeneros” del bar Híbrido, quienes revelaron que “lo molieron a golpes” luego de discutir con ellos.

El occiso fue identificado como Armando González, cuyo cadáver fue encontrado dentro de la jardinera ubicada en el cruce de las calles Liverpool y Florencia de la colonia Juarez, alcaldía Cuauhtémoc, a unos metros de las oficinas centrales de la Secretaría de Seguridad Ciudadana (SSC-CDMX), la víctima presentó golpes en varias partes del cuerpo, principalmente en el rostro. Según el parte policiaco, el crimen ocurrió al rededor de las 5:00 horas del domingo, cuando varios jóvenes se acercaron a los uniformados a pedir ayuda.

Al lugar llegaron dos patrullas que de inmediato pidieron la intervención de paramédicos, quienes, al revisar el cuerpo, sólo confirmaron que ya no tenía vida. Fue entonces que el hermano del occiso y otros amigos que lo acompañaban detallaron a los policías que se encontraban en el bar Híbrido.

Explicaron que cuando los empezaron a desalojar, los empleados del lugar “se pusieron pesados”, pues comenzaron a gritar y empujar a los clientes, entre ellos Armando, quien se hizo de palabras con los guardias de seguridad, luego tres de los empleados lo golperaron y, aunque la víctima gritó pidiendo ayuda, nadie lo ayudo.

Luego, Armando intentó correr para que lo dejaran de agredir y así fue como buscó esconderse en la jardinera; lamentablemente para él, los “cadeneros” lo vieron y ahí, en el piso, lo siguieron atacando hasta que dejó de gritar. Para cuando sus amigos lo buscaron, ya estaba muerto. Los empleados de seguridad escaparon de la escena del crimen y aunque se buscó entrevistar a los administradores, fue imposible, pues ya habían bajado las cortinas del lugar. (El Universal)