Se les acabó su mina de oro

CIUDAD DE MEXICO, 30 de agosto (EL UNIVERSAL/NTX/ EFE).- El Presidente Andrés Manuel López Obrador acusó este viernes a las empresas que vendían medicamentos en sexenios pasados de “promover campañas” sobre niños con cáncer que se están muriendo por falta de medicinas.

“(Los empresarios) están molestos porque tenían una mina de oro y ya se les acabó. Están promoviendo campañas de que se están muriendo los niños por falta de medicamentos”, aseguró el mandatario durante un diálogo con la comunidad en el Hospital Rural Plan de Arroyos en el Estado de Veracruz.

El mandatario recordó que en sexenios pasados se hacían compras de medicamentos por 90 mil millones de pesos (4.481 millones de dólares) y tres empresas vendían 70 por ciento de ellos.

En un diálogo con la comunidad del Hospital Rural Plan de Arroyos, dijo que “estamos batallando” para que no falten medicinas porque antes se robaban hasta el dinero para ello, “no había medicamentos y se gastaba mucho”, como el año pasado cuando se compraron 90 mil millones de pesos en medicinas y en materiales de curación. “Eran tres empresas que son las que tienen ahora las campañas de que se están muriendo los niños porque no hay medicinas para el cáncer, claro que están molestos porque tenían una mina de oro y ya se les acabó”, sostuvo acompañado por el gobernador de Veracruz, Cuitláhuac García, así como autoridades federales y locales del Sector Salud.

Señaló que además de la salud también le preocupa y ocupa el problema de la inseguridad y la violencia, “a ese le estoy dedicando todo el tiempo”, porque requiere de atención permanente, no se puede relegar a otros y por ello lo asume personalmente.

La inseguridad, insistió, es un problema que preocupa mucho y se refirió entonces a la masacre ocurrida el martes pasado en Coatzacoalcos, en el bar “El Caballo Blanco”.

“Esto que acaba de suceder en Coatzacoalcos, un crimen horrendo, da tristeza, cómo pierden la vida tantos seres humanos por gente desquiciada, porque se descompuso por completo la convivencia social”, expresó López Obrador.

Por ello, se tiene que atender la parte social, lo relacionado con la familia y con el bienestar de los pueblos, y resaltó que la seguridad se está atendiendo con trabajo y bienestar, así como a los jóvenes.

“Eso me preocupa mucho, a eso le estoy dedicando todo mi tiempo y sé que vamos a ir serenando al país, porque la paz y la tranquilidad son fruto de la justicia, y vamos a tener buenos resultados”, expresó.

Se comprometió a garantizar medicamentos, no sólo del cuadro básico, puesto que dijo que es una injusticia y discriminatorio que en los centros de salud hay menos claves que en los institutos de seguridad social. Sostuvo que ISSSTE está bastante mal y el sistema de salud pública (hospitales) está por los suelos.

Durante el evento, acompañado del gobernador de Veracruz, Cuitláhuac García, el director del IMSS, Zoé Robledo, anunció que habrá un aumento en los salarios de los médicos que estén asignados a comunidades rurales de un 10 a 20% más de los que están en ciudades.

La polémica sobre el tema se ha agudizado los últimos meses debido a protestas de padres de niños con cáncer que, aseguran, padecieron desabasto de medicamentos en el Hospital Infantil de México Federico Gómez (HIMFG).

Incluso, en últimos días, una madre de familia denunció que a su hija, quien padecía anemia aplásica, no se le administró el medicamento llamado Filgastrín que ayudaba a tratar su padecimiento.

Sin embargo, al mediodía de este viernes, la Secretaría de Salud de México aseveró que la muerte de la pequeña sucedió “a causa de una hipertensión intracraneal” y no por falta de tratamiento contra el cáncer que padecía.