Matar la mayor cantidad de mexicanos

CIUDAD DE MÉXICO, 4 de agosto (EL UNIVERSAL).- Patrick Wood Crusius, autor del tiroteo del sábado en El Paso, Texas, quería disparar a tantos mexicanos como fuera posible, reveló este sábado la cadena ABC News citando a dos funcionarios de procuración de justicia.

Las autoridades se negaron a detallar qué información está brindado el detenido. El jefe policial de El Paso, Greg Allen, se limitó a decir en conferencia de prensa que Crusius “se mostró muy comunicativo. Básicamente no se guardó nada. Se le hicieron preguntas particulares y respondió como necesitábamos que respondiera”.

El sábado se reveló la existencia de un manifiesto atribuido a Crusius en el que señala la “invasión de hispanos” como razón para perpetrar su ataque en el Walmart cercano al centro comercial Cielo Vista, que dejó un saldo de 20 muertos, entre ellos 7 mexicanos, y 26 heridos, de los cuales, 9 son connacionales.

Más de 80 % de la población de El Paso es hispana o latina, de acuerdo con el Censo estadounidense.

El fiscal del Distrito Oeste de Texas, John Bash, dijo que se está tratando este tiroteo como un “caso de terrorismo doméstico”.

Crusius, residente de Allen, Texas, de 21 años, compró legalmente el rifle con el que realizó la matanza, de acuerdo con información que la representante Veronica Escobar dio a la televisora KTSM.

La cadena NBC News dijo que según registros carcelarios de El Paso, Crusius está detenido bajo cargos de asesinato capital.

Maestra juarense, una de las víctimas

Elsa Mendoza Márquez resultó ser una de las víctimas mortales del tiroteo suscitado ayer en un centro comercial de El Paso, Texas. La mujer era juarense y se desempeñaba como maestra de educación especial.

La mujer se encontraba en dicho centro comercial acompañada de su esposo e hijo, pero estos se quedaron esperándola en el vehículo, por lo que resultaron ilesos en el ataque.

Elisa Mendoza vivía y trabajaba en Ciudad Juárez, donde dedicaba su tiempo a trabajar con pequeños de educación especial; sin embargo, los fines de semana solía cruzar a El Paso a visitar a familiares que vivían allá.

Poco antes de que se registrara la agresión, Elsa Mendoza había acudido a hacer unas compras en Wal-Mart, pero debido a que era algo rápido, su esposo e hijo la esperaron en el estacionamiento; fue en ese lapso que ingresó el atacante.

El Paso, la ciudad fronteriza entre México y Estados Unidos volvió a ser noticia este sábado. Pero esta vez, nada tuvo que ver con caravanas de centroamericanos o con las condiciones en las que viven miles de solicitantes de asilos en los centros de detención para migrantes.